El Bellas Artes de Bilbao, el Centro Botín y Chillida Leku funden sus objetivos

El Museo de Bellas Artes bilbaíno, en plena transformación y proceso de ampliación, servirá mañana de anfitrión para este acto que contará con las firmas de Íñigo Sáenz de Miera, director general de la Fundación santanderina; Mireia Massagué, directora de Chillida Leku; y Miguel Zugaza, director del Museo.

Durante la década que ahora concluye y, especialmente en el caso santanderino desde la candidatura a la capitalidad cultural 2016, se han sucedido medidas, acuerdos parciales, negociaciones, textos teóricos y anuncios no siempre luego plasmados en realidad en torno a proyectos de colaboración cultural entre comunidades.

El más llamativo y ambicioso, canalizado a través de la Fundación Santander Creativa fue el del Camino o Corredor Cultural Atlántico esbozado en tres reuniones durante los últimos años en Santander, Oviedo y Gijón y, más tarde, una cuarta en Bilbao. En la andadura llegó a firmarse un convenio.

Acudieron a estas citas con perspectiva ambiciosa once de las quince ciudades que se comprometieron a estar, caso de Burdeos y Oporto al ampliarse el radio de acción y compromiso a Francia y Portugal. En este sentido, Biarritz y Guimaraes también acogieron sendas reuniones.

Sin embargo el proyecto fue progresivamente aparcado y hoy casi extinguido. Las causas son muchas. Desde la ralentizada salida de la crisis a la implicación de demasiadas ciudades -con sus correspondientes cambios políticos cada vez que se convocaron elecciones y, por ende, criterios e interese diferentes-; la ausencia de un presupuesto definido, con aportaciones de cada ayuntamiento, y la imposibilidad de sostener una oficina técnica común que impulsara el proyecto de manera global. La paradoja es que llegó a existir una imagen corporativa y una página web, hoy desactivada. Como curiosidad se invitó a los adalides de esta iniciativa a viajar a China para explicar el proyecto en ese país, porque la Administración estaba interesada en desarrollar modelos similares de gestión cultural.

El artífice principal de este proyecto fue el exalcalde de Santander y exministro Iñigo de la Serna. En 2014 se vivió el momento álgido cuando alcaldes y cargos institucionales de once ciudades firmaron un convenio marco de colaboración al que se sumaron otras cuatro urbes más para impulsar el 'Camino Cultural Atlántico', «una iniciativa cultural y turística liderada por Santander para hacer visible a nivel internacional este territorio singular y muy atractivo».

Un itinerario que, como se señalaba en aquel convenio, se postulaba como heredero del histórico Camino de Santiago y se caracterizaba por atravesar un territorio singular y único dentro de Europa: un corredor costero que concentra un elevado número de ciudades con infraestructuras, patrimonio y programaciones culturales de primer nivel».

El proyecto que sí ha cuajado es el de 'Tan cerca', hoy integrado por Santander, Bilbao y Gijón.

El factor más visible y práctico de esta interacción urbana cultural ha sido hasta el presente el programa de ayudas de la Fundación Santander Creativa, que «promueve el desarrollo de proyectos y actividades culturales creados entre profesionales de las tres ciudades».