Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
raluca mihaela vlad
Viernes, 27 de julio 2018, 00:33
La Euskal Encounter arrancó ayer con ganas de diversión y de cultivar el conocimiento en el BEC. Muchos de los más de 5.000 participantes de la 'party' informática reunidos en el pabellón 5 se conjuran para dormir lo menos posible y aprovechar así el ... tiempo delante de las pantallas. Algún bostezo ocasional sacaba al 'pequeño zombie' que se escondía entre los usuarios como si fuera un troll. «Aquí vengo a socializar, charlar y dar paseos. Es como estar de acampada pero a cubierto», comenta Arkaitz Fernández, recién salido del Grado Superior de 3D Animación, Juegos y Entornos Digitales. Es uno de los asistentes a esta vigésimo sexta edición y un gran defensor de la interacción: «para estar jugando como si no existiera nada más a mi alrededor, me quedo en casa».
El evento se presenta como una macro fiesta con 15.000 metros cuadrados a su disposición, el equivalente a 7 campos de fútbol. Se necesita una semana para desmontarlo todo. Cada persona acude con su propio ordenador, pantallas, suministros e ilusión. Este año, aumentada por el incremento en la velocidad de navegación: 60 gigas, el doble que antes. Si bien «cada ordenador navega según la potencia que tenga», señala Aingeru, un trabajador informático. La Fundación Euskaltel Konekta, organizadora de la cita, destacó el papel que juegan los voluntarios en la correcta marcha del encuentro.
El dueño y autor de la mítica 'Estrella de la Muerte' de la Euskal tiene 23 años y lleva desde 2013 acudiendo con su ingeniosa 'nave'. «Esta es la primera vez que funciona perfectamente». Tras recorrerse otros eventos similares como Campus Party y DreamHack en Valencia, reconoce el esfuerzo que se hace para mejorar cada año la cita de Barakaldo. «Lo mejor de este encuentro es que se escucha a la gente». Empezando por los organizadores, «que están todo el día trabajando». «Son los que se sacrifican» porque ni pueden jugar ni estar con sus colegas. «Los que venimos aquí somos gente a la que le gusta la informática».
Con 10 y 12 años el mundo entero es un campo de juegos y, en esta fiesta «puntual», lo es más. Las dos horas de videojuegos que tienen los fines de semana en sus casas aumentan estos días, aunque con precaución. Su padre, Txemi, cuida sus dietas, paseos y salud, como buen neurólogo que es. «Educar no es fácil porque no hay cómo controlarlo todo», afirma. Pequeños castigos como 5 minutos sin jugar por cada insulto, funcionan. «Es una forma de manejar esa impulsividad». Sus pequeños le escuchan de lejos, emocionados por 'Fortnite' y por la acampada en los Pirineos que vendrá tras la digital.
Un cartel con «piezas en venta» corona el ordenador de Tostado. Cuestan alrededor de 10 euros y las elabora con su propia impresora 3D, fabricada en casa con piezas compradas en distintas webs. Invirtió 300 euros; «ahora es mucho más barato». Los curiosos se acercan para enternecerse con personajes entrañables como 'Groot', de 'Guardianes de la Galaxia', o para pedirle figuras personalizadas. Es un complemento. El resto del tiempo, «si puedo, juego 18 horas de 24», aprovechando el evento, y descarga series y películas. Esta vez, le acompañan sus amigos y dos discos duros de 2 y 3 terabytes.
Un enorme ordenador, modificado por un padre informático, atrapa la vista al fondo del pasillo. Y es largo. Su propietario es un niño de 8 años, habitual del evento. Acompañado por su familia, disfruta de juegos antiguos en el pabellón central y en su propio equipo, construido con tecnología actual pero un diseño retro. Su fabricación costó 2 meses de trabajo y 400 euros entre vinilos, metacrilato, madera y botones, sin contar el gran ordenador que completa el trabajo. «No volvería a hacer algo así nunca», confiesa el padre.
Con la pantalla preparada para 'Wesnoth' y una bolsa de pistachos al lado, está feliz estrenando el evento. Lo compagina haciendo páginas web de seguridad informática.
Su afición por los videojuegos la ha traído al Encounter durante siete años. Acompañada por amigos de Madrid y Barcelona, recuerda que al principio «ver a una chica era como darte con un canto en los dientes». Ahora, «hay muchas más». La criatura 'Sombra Sigilosa' de 'Cómo entrenar a tu dragón' mira su pantalla, iluminada con 'The Witcher 3'. Buenos gráficos que compiten con 'World of Warcraft', otro de sus favoritos. Ha estado todo el día con bromas, juegos y lanzamientos de CDs, competición que se premia con «algún premio tonto» como una botella de agua de 'Star Wars'.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.