Cirugía de párpados con láser CO2

El láser CO2 Lumenis Acupulse es una nueva tecnología para tratar diferentes patologías de párpados que se utiliza actualmente en muy pocos centros de España. A diferencia de otros tipos de láseres su tecnología es más avanzada y superior. Contiene el Modo COMBO que es el único que en un mismo momento trata la piel superficial y profunda. De hecho, en Bizkaia está presente en tan solo dos centros de Bilbao siendo el del Centro IMQ Barakaldo el primero fuera de la capital. Esta tecnología sirve para realizar una cirugía de párpados más precisa, con menos sangrado intraoperatorio y mucho mejor postoperatorio y resultado.

Se utiliza, sobre todo, en las blefaroplastias que es la cirugía para corregir el exceso de piel de los párpados, pero tiene otros múltiples usos en lesiones menores de los párpados y para eliminación de cicatrices. Pero su uso estrella es el resurfacing para tratar la flacidez de la piel periocular y facial.

Otras lesiones menores que también se tratan con esta técnica: xantelasmas (pequeñas acumulaciones de grasa bajo la piel), pigmentaciones, nevus (lunares dentro de los ojos), queratosis (cuando la capa córnea crece de manera anormal), siringomas (pequeños tumores benignos de la piel). Estas enfermedades no solo generan un problema estético, sino que también pueden producir una alteración en la distribución de la lágrima por no existir un adecuado parpadeo, así mismo puede producirse una disminución de la visión por reducción del campo visual.

Esta técnica también se realiza para disminuir las arrugas y mejorar el aspecto de la piel tratando de esta manera la zona periocular de manera global y mejorando el resultado. Esto es posible estimulando la renovación de colágeno y disminuyendo el poro. Posiblemente sea el mejor láser de CO2 fraccionado del mercado porque permite actuar a nivel cutáneo superficial, intermedio y profundo.

Intervención y postoperatorio

El láser CO2 fraccionado es muy preciso y eficaz, ya que actúa de manera selectiva, vaporizando la zona afectada y respetando por completo los tejidos circundantes, de esta manera aumenta la precisión en el tratamiento de lesiones de párpados. Su aplicación consiste en pequeños impulsos de luz dirigidos a la zona de la piel a tratar. Además, permite realizar pulsos más cortos, aportando una mayor comodidad para el paciente.

La intervención dura aproximadamente 30 minutos, pero varía dependiendo de si se realiza cirugía o si se combina con el resurfacing. El uso del láser Acupulse CO2 disminuye el tiempo quirúrgico y el sangrado lo que resulta en un postoperatorio con menos hematomas y edema haciendo que la recuperación sea más rápida.

Uno de los factores clave para el éxito del tratamiento son los cuidados posteriores, que consisten básicamente en el uso de pomadas humectantes y cicatrizantes durante la primera semana. Además, es importante aplicar frío en la zona tratada con el láser para combatir la inflamación. Importante también que el paciente se aplique cremas con elevado factor de protección solar y que evite la exposición directa al sol durante las semanas posteriores al tratamiento.