El hallazgo podría prolongar la vida útil de los órganos humanos y facilitar los trasplantes. el correo

Logran 'resucitar' órganos de cerdos muertos con una nueva tecnología

Los científicos de la Universidad de Yale autores del hallazgo aseguran que en el futuro podría tener un gran impacto en los trasplantes humanos

Jueves, 4 de agosto 2022, 00:33

Órganos y tejidos de cerdos muertos han vuelto a funcionar una hora después del fallecimiento de los animales gracias a un tratamiento con un nuevo fluido protector celular desarrollado por científicos de la Universidad de Yale (Estados Unidos). Al restaurar la circulación sanguínea, se ... podría «ayudar a extender la salud de los órganos humanos durante la cirugía y ampliar la disponibilidad de órganos de donantes», afirman los investigadores.

Publicidad

El grupo había logrado restaurar ya en 2019 algunas funciones en el cerebro de un cerdo muerto, afectado por la falta de riego sanguíneo. Una vez conseguido, se propuso lograr «algo similar en otros órganos vitales que pudieran ser trasplantables», explica Nenad Sestan, profesor de Neurociencia, que ha dirigido ambos estudios. El último de ellos se ha publicado en la revista 'Nature'.

El tratamiento consiste en irrigar los órganos con un «fluido experimental que contiene compuestos que pueden promover la salud celular y suprimir la inflamación del cuerpo». La técnica requiere el uso de una máquina de perfusión similar a las que se usan para bombear sangre durante una cirugía. A los cerdos, previamente anestesiados, se les indujo un paro cardíaco y «una hora después de su muerte, fueron tratados con OrganEx».

Seis horas más tarde se vieron los resultados. «Ciertas funciones celulares clave» se activaron en el corazón, el hígado y los riñones. Además, «algunas funciones de los órganos se restauraron», como la actividad eléctrica cardiaca, que permitió que el corazón se contrajera. También había circulación «por todo el cuerpo». «Nos sorprendió», dijo Sestan. «Cuando el corazón deja de latir, los órganos comienzan a hincharse, colapsan los vasos sanguíneos y se bloquea la circulación». En el cerebro, sin embargo, no había actividad eléctrica.

El hallazgo podría «prolongar la vida útil de los órganos en pacientes humanos», «ampliar la disponibilidad de órganos de donantes para trasplantes» y «ayudar a tratar órganos o tejidos dañados por isquemia durante ataques cardiacos o accidentes cerebrovasculares».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad