El actor de moda es vasco (Jacob Elordi)

Jacob Elordi, el actor vasco que causa furor en la Mostra de Venecia

La Mostra de Venecia de este año se ha visto deslucida por la huelga de actores y guionistas. Muchas de las grandes estrellas del panorama internacional no se han desplazado hasta la Ciudad de los Canales para presentar sus últimos trabajos en apoyo a una movilización que pide un incremento del salario y los royalties para los artistas. Sin embargo, un nombre ha hecho brillar el festival con luz propia: Jacob Elordi.

Sí, Elordi, un apellido vasco. Se trata del actor de momento. Sus apariciones en la ciudad italiana han sido muy comentadas y le han llovido los elogios como si estuviera bajo los efectos de una DANA. El joven, de 25 años y nacido en la ciudad australiana de Brisbane, ha acudido a presentar la última película que dirige Sofía Coppola, 'Priscilla', un biopic de la esposa de Elvis Presley, a quien Elordi da vida en la gran pantalla.

El caso es que el intérprete se ha hecho carne en Venecia y ha derretido las redes sociales. «Ahora, los actores y actrices se ponen de moda por ellas y por su aparición en las plataformas de 'streaming'», analiza Oskar Belategui, crítico de cine en este periódico. En Instagram, Elordi tiene solo medio centenar de fotos, pero le siguen más de doce millones de perfiles. Ante, Netflix le puso en órbita con su papel en 'Euphoria', Nate, una estrella del deporte adolescente que destila masculinidad tóxica... vamos, un chico malo atormentado.

Lo curioso es que aunque su pasaporte dice que es australiano, su apellido nada tiene que ver con el mundo anglosajón. Elordi tiene orígenes «vascos, que no españoles». Su abuelo puso rumbo a nuestra antípodas con su mujer y su hijo en busca de una vida mejor. Tenía solo ocho dólares en el bolsillo. Y allí se quedó. El pequeño, de nombre Jon (o John, en su grafía inglesa), tenía ocho años y es el padre de Jacob.

Lo que hizo el aitite no es un viaje extraño. Por aquella época, más de 2.000 vascos emigraron a Australia en busca de trabajo. Su destino laboral fue, en la mayoría de los casos, los campos de caña de azúcar y las plantaciones de tabaco. Hace tres años, cuando su personaje de Euphoria le empezó a poner en el mapa del cine, Elordi reveló en un vídeo que hizo para la revista GQ sus orígenes euskaldunes. Solo que precisó más que la Wikipedia, donde se dice que tiene «ascendencia española».

«Eso no es verdad», explica en la grabación el artista. «Soy de ascendencia vasca, un pequeño lugar entre Francia y España», explica de manera didáctica. «Mi abuelo me estrangularía si supiera que van diciendo que tengo ascendencia española», terminaba entre risas.

Sin embargo, no se hagan muchas ilusiones, porque aunque, como ha comentado en una entrevista a 'El País' hace meses, está «superorgulloso de esa herencia», lo cierto es que a Jacob no se le ha visto mucho por Euskadi. La imagen que tiene de la tierra de sus ancestros no deja de ser la de un guiri. Al parecer, vino de pequeño y la imagen que se le quedó de este país es la de «hombres peludos y audaces matando pollos». Suponemos que lo que recuerda no es otra cosa que la Fiesta de Gansos de Lekeitio.

Al inicio de su carrera -el primer pelotazo le llegó en 2018 con la serie 'El primer beso'-, algunos ya se fijaron en que sus rasgos no eran muy anglosajones e, incluso, deslizaron que era una 'belleza vasca'. Mandíbula prominente, cejas gruesas, ojos oscuros y nariz angulosa... Esta semana, en Venecia, sus looks han resaltado aún más ese atractivo rotundo y un poco a lo Marlon Brandon. Aunque realmente, de pequeño jugaba a emular a Paul Newman y Laurenc Olivier en los pasillo de su casa. A los 13 decidió ser actor tras ver a Heath Ledger en 'El Caballero de la noche'

Elordi es el menor de cinco hemanos. El mayor, Michael, es solo por parte de padre, pero mantienen una relación excelente. Las otras tres son chicas: Isabella, la mayor, es fotógrafa y bailarina, y Jalynn, modelo. Ello también le convirtió en una especie de 'principito': «Siempre he estado muy mimado». Pero se ha tenido que batir el cobre para llegar a donde está. Su padre era pintor, pero de brocha gorda, y su madre, Melissa, ama de casa.

Él si hizo las Américas para hacerse un hueco en Hollywood. Emigró a la meca del cine con apenas 19 años, durmió en su coche varias noches y su primer papel fue hacer de extra en 'Piratas del Caribe: la venganza de Salazar'. Un año después se estrenaría 'Swinging Safari' y 'El primer beso', su primer 'pelotazo'. No obstante, cuando fue al casting para hacer la serie 'Euphoria', que se estrenó en 2019, solo tenía 400 dólares en el banco.

Desde entonces hasta ahora no deja de aparecer en anuncios, portadas de revistas, alfombras rojas... «Es el chico del momento y cuida mucho su imagen», subraya la estilista vizcaína Ana Vijandi. Pero lo hace al estilo moderno. En Venecia, sus 'outfit' no han dejado indiferente a nadie desde el primer momento. Se bajó del avión con un look sencillo, pero con un toque chic: camiseta blanca, vaqueros rectos de Zegna, el último bolso de Louis Vuitton, gorro y gafas de sol. Un homenaje a James Dean en toda regla. «El bolso le daba ese punto sofisticado que se contrarrestaba con la gorra, muy surferilla», opina la profesional.

En la alfombra roja desplegó toda su elegancia con toques chic, como el broche en forma de mariposa que llevaba en su traje negro, o el carísimo reloj Cartier de casi 40.000 euros que llevaba en la muñeca. Era el modelo Tank Normale y solo hay 200 unidades en todo el mundo. «Es muy guapo y tiene una frescura supernatural, lo que llama la atención», prosigue Vijandi.

- ¿Y su estilo?

- Es muy personal, mezcla mucho. Es capaz de unir lo hipster y lo desenfadado, con esa barba de tres días arreglada y perfecta, con algo mucho más formal. Y lo defiende muy muy bien

Esto último es importante. No parece un disfraz, parace su piel. Vende una imagen muy masculina, aunque no cree mucho en esas reglas estéticas. De pequeño sufrió las burlas de sus compañeros por todo lo contrario. La 'culpa' era su afición a actuar y a los concursos de belleza. ¿Su reacción? «Empecé a ponerme maquillaje. Me ponía purpurina morada en la cara y el pelo de punta con mechas rosas. Pasé de la cultura de la cerveza y del deporte, y pensaba: 'si crees que esto es gay... soy el mismo que cuando era tu amigo, el mismo tío hetero de antes».

«Lo tiene todo», resume la estilista vasca. Hasta la altura: mide 1.95 y en la ciudad de los canales sobresalía aún más al lado de su 'partenaire', Cailee Spaeny. Todo ello le ha hecho convertirse en imagen de firmas como Yves Saint Laurent, Valentino, Bulgari y Hugo Boss, entre otras.

Su personalidad también es su gran activo. Y precisamente ella ha sido la responsable de que Coppola le eligiera para ser su Elvis. A España este largometraje llegara el 27 de octubre.

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