Ana, la experta en moda que alegra Getxo con sus looks multicolor

Sarai Vázquez

Viernes, 26 de agosto 2022, 21:57

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El optimismo caracteriza a Ana Gon. «Mis amistades y familia me ven triste o enfadada muy poco ¡La vida está para disfrutarla y ser feliz!», confiesa con una gran sonrisa. Una vitalidad «al 100%» que esta peruana de 36 años -lleva más de media vida asentada en Getxo- también traslada a sus looks: «Es un estilo de vida, por dentro y por fuera». Una sucesión de ornamentaciones, estampados vistosos y tonalidades llamativas integran sus originales combinaciones, que no pasan desapercibidas en el municipio vizcaíno. «Antes era muy discreta, pero con los años he aprendido que hay que ser 'descaradita' y no tener miedo a arriesgar», admite. En estos tiempos, en los que principios como el 'menos es más' y el minimalismo, el admirado estilo de las mujeres nórdicas, viven su época dorada, esta experta en moda se sale de la tónica habitual apostando por la estética maximalista. «La moda me hace sentir libre y artista al combinar texturas, 'prints' y mucho color», añade.

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Aún desconoce el origen de su pasión por la moda. «Siempre he sido muy coqueta, pero ni mi madre ni mi abuela lo han sido nunca en exceso. La única persona que me ha podido unir a este mundillo ha sido una de mis tías, que es costurera. De pequeña yo ya les hacía faldas a mis muñecas con las blondas que les cortaba a los calcetines, mi ama no hacía más que regañarme», cuenta entre risas. Pese a su grandes dosis de creatividad e ingenio en la moda, Ana escogió otro camino profesional. Se diplomó en Integración Social y trabajó cuatro años en la asociación ASPACE de Bizkaia, que defiende la dignidad y los derechos de las personas con parálisis cerebral.

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Pero en 2013 decidió dar un giro de 360 grados a su vida laboral. «Estaba muy feliz y enamorada de mi trabajo, pero la moda cada vez me atraía más», cuenta. Fundó su propio blog, 'Ana Living Fashion', se diplomó en Estilismo y Producción de Moda por el grupo editorial Condé Nast College; y enseguida se abrió paso en la industria. «Empecé a trabajar como estilista y productora en la revista 'Hola' Perú y para diferentes grandes almacenes del país», explica. En 2014 abrió el espacio 'Factory 240', una tienda alternativa situada en el corazón de la villa que cerró tres años después. En la actualidad, Ana gestiona el marketing de diferentes comercios de Getxo, además de encargarse del estilismo y la producción de editoriales para fotógrafos y diseñadores de moda.

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En su extenso armario, que ocupa una habitación de su piso, conviven prendas de comercios de Getxo, como Due&Go, Charo Álvarez o Bohemian & Co, con otras de las tiendas del grupo Inditex. «El truco está en no tirar nada porque las modas siempre vuelven», asegura. Entre esos tesoros de otra época que conserva, destacan una falda estampada «preciosa» de su madre que le transporta directamente a su infancia; su vestido de novia, con el que se volvería a casar otra vez, y un traje «precioso» hindú que adquirió en un viaje.

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En su guardarropa, también reserva un hueco privilegiado para los diseños que crea puntualmente ella misma a golpe de su máquina de coser con los tejidos que adquiere en El telar de Alberto, en Getxo. «Me inspiro en diferentes diseños que veo en 'Pinterest' y en las revistas de moda. Pongo desde canciones de Mozart hasta el último éxito de Los 40 Principales y me dejo llevar», cuenta. Con sus propias manos, confeccionó, entre otras piezas, el look completo que lució en la última edición de la MBFW Madrid, integrado por un chaleco reversible, acolchado y rojo; una falda tubo y un bolso de trapillo. Su última creación ha sido un vestido de ganchillo para lucir este verano en su viaje a República Dominicana: «Lo hice siguiendo los pasos de un tutorial de Youtube».

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Ya alejada de su blog, Ana inspira a miles de usuarios desde su cuenta de Instagram, donde supera los 1.700 seguidores. Después de haber encontrado su sitio en la moda, esta mujer alegre y vitalista espera poder disfrutar de un mundo que le apasiona durante muchísimos años más. «Los mismos en los que espero poder seguir paseando de la mano de mi madre y mi abuela, que tiene 89 años», añade. En septiembre, estará a caballo entre Getxo y Madrid por proyectos laborales, eso sí, cada vez que regrese promete subir los colores al municipio vizcaíno con su optimismo y looks multicolor.