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¿Cómo ha ido ... la semana? Llevo días amaneciendo como un pez globo, como si me hubiese tragado un balón de baloncesto o fuese mi hámster de la infancia, con una especial destreza para acumular comida en sus mofletes. Pregunté en la cuadrilla algún remedio 'anti-hinchazón mañanero'. Y salió al rescate un amigo con su truco casero: guarda dos cucharillas de café en el congelador y se las coloca en los ojos cuando se levanta para hacerse un «masaje drenante». «La llamada 'cara de almohada' presenta hinchazón en los pómulos y, sobre todo, en los párpados inferiores», explica la dermatóloga Izaskun Ocerin.

Pero, ¿por qué nos despertamos como si hubiésemos dormido en una colmena? «Por la noche se dificulta el drenaje linfático porque no movemos los músculos del rostro, que son los que activan la circulación. Y, además, estamos en posición horizontal, por lo que se estanca la sangre y retenemos líquidos. Pasa lo mismo que con las piernas, que se nos hinchan cuando estamos mucho tiempo de pie», explica Paloma Borregón, dermatóloga y directora médica de la Clínica Kalosia (Madrid).

Ese rostro inflamado, esa triste mirada mañanera de perro pachón, afecta más a las mujeres. Y, especialmente, a partir de los 40. «Influyen, además de la genética, los factores hormonales. Durante la perimenopausia se retienen más líquidos por la alteración de estrógenos y progesterona. Y, por la misma causa, ese rostro hinchado también es frecuente antes y durante la regla», explica la doctora Ocerin. Pese a ser un problema común, requiere atención: «Levantarnos habitualmente con los ojos inflamados no es algo que deba banalizarse, porque los edemas pueden esconder alteraciones metabólicas, como un problema de tiroides, falta de hierro o de proteínas...», advierte la dermatóloga Sara Carrasco.

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Para despertarse con un rostro más terso, además de las horas de sueño, también influye la postura. «Lo ideal es dormir boca arriba, porque si lo hacemos de lado, dificultamos la circulación y, además, al aplastar la cara salen las llamadas 'arrugas del sueño', líneas que aparecen en vertical y que a cierta edad pueden quedarse de forma permanente», apunta la doctora Borregón. Ella duerme con una 'almohada de la belleza', que deja un hueco en la zona de la cara para evitar que se aplaste. Para la doctora Ocerin la mejor postura para despertar sin la hinchazón es «dormir con la cabeza más alta que los pies». «Conviene optar por doble almohada o una sola que resulte más firme y elevada. Y son necesarias siete u ocho horas de sueño reparador para evitar la inflamación».

Paloma Borregón, dermatóloga y directora médica de la Clínica Kalosia (Madrid), tumbada sobre su 'almohada de la belleza'.

La alimentación también pasa factura. Y salta a la vista. «Lo que comemos debería ser lo primero a revisar, porque quizá no estemos ingiriendo suficientes frutas y verduras», apunta la doctora Carrasco. En opinión de Ocerin, «hay que evitar la dieta rica en sodio, es decir, alimentos salados y productos ultraprocesados. Y procurar que la cena sea ligera y temprana». En cuanto al alcohol, también afecta a la piel, porque además de arrugarla, «al tener un efecto vasodilatador, la hincha».

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Para un rostro más firme, el frío sirve como cura de emergencia. «Podemos aplicarnos por la mañana geles de efecto frío o usar antifaces de gel que previamente hemos guardado en el frigorífico. Funcionan para combatir el componente inflamatorio de las bolsas porque mejoran el edema y activan la circulación», explica la directora médica de la Clínica Kalosia (Madrid). La cosmética también sirve para espabilar la mirada. «A las pacientes les recomiendo que guarden en la nevera el contorno de ojos, que debería incluir ingredientes descongestionantes como la cafeína y la vitamina K. Se debe aplicar por el exterior de la ojera, en el hueso, a toquecitos con los dedos anular y corazón. Y repetir varias veces, siempre desde el lagrimal hasta la zona de la sien», explica la dermatóloga de la clínica Iratxe Díaz. Y sí, no desmaquillarse por la noche es un pecado. «Si limpiamos los ojos con desmaquilladores bifásicos, después hay que hacer una retirada con uno jabonoso. Pero lo más importante es buscar un buen diagnóstico para solucionar la causa que produce esa hinchazón», concluye la doctora Carrasco.

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