Zierbena se calza las zapatillas solidarias

El pistoletazo de salida será a las 11.00 horas y los participantes podrán completar una única vuelta, con un recorrido de 1,5 kilómetros, o dar hasta un máximo de cinco. Podrán participar grupos formados por entre 2 y 10 personas en tres categorías: hermanos, parejas o amigos; otra de segunda generación con padres, hijos, tíos o sobrinos; y una de tercera en la que convivan abuelos, padres e hijos.

Las plazas están limitadas a 700 personas y el plazo para apuntarse, en la web www.carrerasfamiliares.eus, se cierra el día 10. El coste de la inscripción, destinado a Aspanovas, será de 10 euros por grupo.

Se entregarán dorsales y pulseras para computar el número de vueltas, y habrá dos avituallamientos. La animación estará garantizada con una diskodantza y se sortearán bicicletas entre los participantes.

El alcalde en funciones de Zierbena, Iñigo Ortuzar, destacó ayer en la presentación oficial del evento que, desde su remodelación hace más de dos décadas, el puerto es un lugar habitual para la práctica deportiva. «Tiene un circuito bastante majo y en la zona hay muchos restaurantes buenos y conocidos» para reponerse después, apuntó.

Por su parte, el técnico de relaciones interinstitucionales de Petronor, Gualber Atxurra, animó a participar en la prueba «como opción saludable para ocupar el ocio y el tiempo libre de la familia, por una causa noble y honesta». «Y el lugar en el que se desarrolla la carrera es un bonito sitio para pasar un día en clave costera», agregó.

La jornada dejará huella en Aspanovas, que cumple ahora 30 años. La entidad invertirá el dinero de la recaudación en sus programas de apoyo a las familias con niños que padecen cáncer.

De este modo, les facilitan su estancia cerca del hospital para que puedan acompañar a los menores ingresados, les proporcionan vales de comida, así como ayuda psicológica durante el proceso. «Nos ponemos al servicio de la familia, que muchas veces se encuentra sin saber de qué recursos puede disponer, qué permisos laborales tiene o qué hacer con sus otros hijos», detalló su coordinadora, Ainhoa Fernández. En 2018 atendieron a casi un centenar de familias en el hospital de Cruces.