Velocidad máxima de 25 kilómetros por hora y prohibido circular por las aceras

Aunque la ordenanza municipal de tráfico de Barakaldo no incluye una regulación concreta para los patinetes eléctricos como sí ocurre en otros municipios, todos los usuarios que hagan uso de este tipo de vehículos deben atender a una serie de requerimientos recogidos en la normativa nacional. Entre ellos, la prohibición de circular por aceras, zonas peatonales, pasos de travesía, autopistas, autovías, vías interurbanas o túneles en ámbito urbano. Los usuarios solo podrán moverse por calzadas urbanas.

Además, los usuarios no solo deberán respetar las señales de tráfico, sino que no podrán circular por encima de los 25 kilómetros por hora en ningún punto de la ciudad. Los conductores de patinetes eléctricos estarán sometidos a las mismas tasas máximas de alcohol que los que conduzcan un coche o una moto y tampoco podrán llevar auriculares ni usar el móvil mientras están al volante. Igualmente, se recomienda el uso de casco y contar con un seguro de responsabilidad civil.

La DGT va un paso más allá y establece las características que tienen que tener los patinetes que circulen por la ciudad. El reglamento recoge que todos deberán contar con un sistema de frenado, luz y reflectantes. Igualmente, es obligatorio que cada patinete tenga un certificado de circulación que acredite que el vehículo cumple con los requisitos mínimos de seguridad.

Aunque Barakaldo aún no dispone de un reglamento específico sobre el uso del patinete eléctrico, el Ayuntamiento aprobó a principios del pasado año una modificación de la ordenanza municipal para vetar la entrada de estos vehículos en sus autobuses urbanos, el Kbus, con el objetivo de evitar el riesgo de explosión de las baterías, al igual que hicieron otros medios de transporte como Bizkaibus, Bilbobus, Renfe, metro y Euskotren.