Tres robos con violencia al día en Bizkaia

Se trata de cifras que superan las de 2019, el último año precovid, y que confirman la escalada de golpes, tirones o empujones para hacerse de forma indebida con un móvil de última generación o una cadena de oro, así como la proliferación del uso de navajas y cuchillos a las salidas de discotecas o en trifulcas en la calle. Una tendencia en la que han puesto el foco las autoridades, tal y como admitió la semana pasada el vicelehendakari primero y consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, y que los profesionales también certifican.

«Vemos un aumento claro de las intervenciones en las que se actúa con arma blanca. Lo que hace dos décadas era una pelea nocturna que se resolvía a puñetazos, ahora en cualquier momento se utilizan navajas o se recurre a los botellazos, pero las consecuencias son mucho más graves», advierte un agente de la Policía Municipal de Bilbao, una de las localidades que más sufre este incremento de la criminalidad. Un ejemplo claro de estos episodios es lo que ocurrió el pasado viernes en el barrio bilbaíno de Santutxu, cuando una docena de jóvenes, muchos de ellos menores se enzarzaron en una trifulca en la que resultó herido un chaval de 14 años.

El informe desglosa los datos de comunidades, provincias, capitales de provincia y localidades de más de 20.000 habitantes. A nivel provincial, solo Huesca supera a Bizkaia con una subida del 300% de los robos violentos. Según Sergio Gómez de Segura, secretario general del sindicato Erne, este tipo de delitos se vinculan más a «entornos urbanos y con mucha población», de ahí las diferencias con Álava, en la que estos ilícitos decrecen, y con Gipuzkoa, con un 34% más de denuncias registradas.

Por grandes ciudades, es llamativo el ascenso en Bilbao, con 326 robos con fuerza en los primeros nueve meses de 2022 y 713 en el mismo periodo del curso anterior. El crecimiento de este tipo de delitos en el territorio, se produce de forma generalizada, pero los municipios con peores datos son Erandio (+1.366%), Durango (+725%) Leioa (+300%), Portugalete (+158%) y Bilbao (+118%).

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El robo con violencia o intimidación está considerado un delito estratégico ya que genera una gran alarma social. Se trata de ladrones que abordan a la víctima amenazándola con un arma blanca o a la que agraden sin ningún pudor para apoderarse de dinero, el bolso, un smartphone o una joya. Gómez de Segura explica que este tipo de infracción ha relegado al tradicional 'robo al descuido' en el que los delincuentes «con cierta profesionalidad» se las ingeniaban para hacerse con la cartera sin que su presa se percatase. «Ahora les da igual golpearte. Hay un empleo brutal de la violencia. Para robar a una mujer de 80 años, que en muchas cosas si se lo piden se lo va a dar, la tiran al suelo para robarle la cadena».

Quieren hacerse con su botín lo más rápido posible y utilizan los recursos que sea para conseguirlo. En ciudades como Bilbao el incremento de casos ha generado una «sensación de inseguridad» que la ciudadanía transmite a la Policía Local a través de «quejas o comentarios a pie de calle», revelan fuentes del cuerpo. «Hay poca gente hoy en día que no conozca a alguien al que le han robado el móvil por la calle». Fuentes del Ayuntamiento de la capital vizcaína declinaron valorar los datos al no disponer del balance anual completo, pero recordaron que «no se puede comparar 2022 con 2021 o 2020, ya que son años en los que no se ha celebrado ni Aste Nagusia ni fiestas en barrios. El ocio nocturno ha estado restringido. Sí nos consta un aumento de los robos con violencia respecto a 2019, pero en un porcentaje bastante menor». Desde el Consistorio aseguran que se trata de una situación que «preocupa» y, por eso, se organizan «dispositivos específicos y conjuntos con la Ertzaintza, con muy buen resultado».