Las playas vizcaínas se preparan ya para su primer fin de semana de temporada. Sin embargo, el tiempo no parece que vaya a ser muy veraniego. Este jueves se ha despertado oscuro y con precipitaciones débiles que han pasado a intensas. A mediodía ... se ha activado la alerta amarilla por tormentas y chubascos localmente fuertes. En algunos puntos, como en Galdakao, se han registrado poco antes de las dos de la tarde 5,6 litros por metro cuadrado en diez minutos.
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Esta va a ser la tónica para las próximas horas y días. Así que más que el traje de baño va a tener que coger el paraguas y una rebequita.
Los meteorólogos preven un fin de semana gris y fresco, con chubascos y tormentas en algunos puntos del norte penínsular. Si está pensando en viajar a otras comunidades para librarse, tenga en cuenta que cuanto más al oeste, peor. Tampoco habrá escapatoria hacia la zona del Ebro, siete provincias están en alerta por precipitaciones localmente fuertes: Álava, Huesca, Zaragoza, Burgos, Soria, Navarra y La Rioja.
El viento sopla ya del norte, por lo que los termómetros ya marcan temperaturas muy por debajo de estos días y no se superarán los 17-18 grados.
El viernes no presenta mejor cara. Cómo decía Blas de Otero en un poema sobre Bilbao: «qué le vamos a hacer si llueven / insistentemente / y, debes decirlo, delicadamente». El cielo estará cubierto durante gran parte del día y a las precipitaciones, les acompañará rayos y truenos que pueden ser «localmente intensos», advierten desde la Agencia Vasca de Meteorología. El tiempo será más propio del otoño que del verano que se acerca y el viento norte mantendrá las temperaturas por debajo de los 18 grados en Bizkaia. Eso sí, po la tarde-noche los chubascos irán a menos y también disminuirá la nubosidad.
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Sin embargo, el sábado amaneceremos también envueltos en nubes. Serán bajas durante la primera mitad del día y de evolución por la tarde-noche, sobre todo en el interior, explican desde Aemet. Habrá aire flojo del noreste a primeras horas, aunque aumentarán de intensidad después. Y seguiremos echando mano de la chaqueta, aunque algo menos porque se espera que los termómetros registren máximas «en ligero a moderado ascenso».
El domingo, por su parte, parece que será un poco más benigno, aunque aún sea pronto para vender la piel del oso. El ambiente será algo más soleado, aunque las nubes no se irán del todo y las temperaturas subirán.
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