Tiempo de reinventarse

Txema Soria

Miércoles, 13 de mayo 2020, 00:32

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El pasado 18 de marzo Moisés Omeñaca, director de Uniformes Moyua, que viste a los mejores restaurantes y hoteles de la villa, ingresó en el hospital de Basurto afectado por el coronavirus. Un mes más tarde, cuando terminó la cuarentena, completamente curado e inmune, comenzó de nuevo a trabajar. «Debemos ser conscientes de que el virus está ahí, pero tampoco podemos paralizarnos durante meses y meses, sería nuestra ruina». A Unai Aizpuru, presidente de Bilbao Historiko, el encierro le cogió en Puerto de la Cruz (Tenerife), donde cada mañana se levanta con una temperatura de 22 grados. Trabaja igual que si estuviera en el botxo. «Desde Bilbao Historiko estamos intentando conseguir que el bilbaíno sepa que muy cerca de su casa hay barrios con mucha vida y con una estupenda oferta de ocio y comercio», subraya.

La diseñadora Ana Roquero, cofundadora de Cookplay, ha pasado el encierro junto a su hija Sara. Ha aprovechado para renovar la página web de la empresa e intentar vender 'online' las piezas de menaje que diseña. Entre ellas destacan unos boles creados por Ana a finales del pasado año, realizados en caña de azúcar, que sus clientes del mundo de la hostelería, muchos de ellos estrella Michelin, quieren incorporar para su línea takeway y así poder llevar comida a domicilio en recipientes completamente ecológicos y sostenibles.

La pintora Sol Mateos, que nunca había estado tanto tiempo aislada, ha ocupado su tiempo en crear. «Ha sido un periodo creativo muy intenso, un despertar personal». Cada día ha dibujado de manera febril, ha pintado al óleo, ha escrito relatos y, sobre todo, ha fotografiado cada rincón de Bilbao, desde edificios emblemáticos a pequeñas plazas y parques. Marian Galíndez, presidenta del Club Deportivo Bilbao, acude cada mañana a su despacho en una empresa de servicios jurídicos. Durante el confinamiento ha estado en contacto con los responsables de diferentes clubes del Estado y con muchos de los socios del Deportivo. «No sabemos cuándo abriremos, todo dependerá de Sanidad. La gente de nuestro club es muy sensata, sabe que no puede hacer deporte sin total garantía». Martín Basterra, cinco veces campeón de España de halterofilia, ha empezado a arrancar poco a poco su taller de fabricación y diseño de joyas. En este tiempo ha diseñado nuevas piezas. «Los clientes de hoy son más jóvenes y ello te obliga a reinventarte. Internet, en el futuro, puede abrir nuevos mercados, algo que no es fácil, ya que las joyas son un producto que el cliente necesita ver, tener en la mano».