«En la discoteca había mucha gente y cámaras, la Policía puede investigar»

De la noche en la que apareció malherido, tirado en las vías del tren de una estación de Milán, Daniel Rodríguez no recuerda nada por el golpe. El padre expone cómo, al principio, se sintieron un poco desamparados porque fueron ellos los que se desplazaron en busca de la Policía y los que insistieron en que investigaran. Y así fue como se llevaron el móvil del chico para ver si de ahí podían sacar información.

Daniel Rodríguez padre señala que en el teléfono de su hijo no estaba buscada la dirección del hotel y que se dejó la chaqueta dentro sin despedirse de sus amigos, por lo que no cree que se dirigiese solo al establecimiento donde se alojaban.

Este padre quiere respuestas a preguntas que no sabe si alguien se las está planteando. «Noto que todo el mundo quiere escurrir el bulto en historias de este tipo pero nosotros queremos saber qué pasó, por qué Daniel tiene golpes donde los tiene y para eso necesitamos que se investigue y todo se clarifique», anota Daniel Rodríguez que ha aprovechado el tirón de los medios de comunicación para presionar y expresar cómo de solos se habían sentido allí en Milán. «Gracias a que se ha presionado, va a venir a vernos el cónsul y esperamos que sea para echarnos una mano», apunta el progenitor del joven motrileño.

«Al parecer, los porteros vieron algo»

Daniel padre cuenta que una amiga de su hijo se ha desplazado estos días hasta Milán y que sabe italiano. «Le dijo a la Policía que viniese a vernos al hospital y estos les dijeron que fuésemos nosotros a la Comisaría. La investigación está abierta de oficio, si se cerrase, nosotros denunciaríamos», expresa.

Al padre de Daniel se le ocurren muchos hilos de los que tirar ahora que la historia está caliente. «Se le puede preguntar a los porteros de la discoteca que, al parecer, vieron algo. Allí había mucha gente y seguro que alguien lo vio, además hay cámaras en la puerta que se pueden revisar», resalta Rodríguez que quiere que el caso siga vivo y saber quién o quiénes pudieron herir de esa manera a su hijo. «Lo único que sé de la Policía es que le echaron fotos en la vía del tren y después aquí en la UCI», apunta este motrileño que tiene poca información.

Daniel está asistido por profesionales, psicólogo, fisioterapeuta y como es «cabezoncillo» se ha empeñado en ponerse bien pronto, cuenta su padre con orgullo. En algunos días empezarán a hacerle ejercicios para poder ir cogiendo movilidad.

Daniel Rodríguez es un físico e ingeniero electrónico que en la actualidad trabaja para el Instituto de Física Corpuscular, centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y de la Universidad de Valencia, y se desplazó a Milán el pasado viernes 28 junto a un grupo de veinte amigos para celebrar la despedida de soltero de uno de ellos, el primero del grupo en contraer matrimonio.

Los padres fueron alertados ese domingo de que su hijo iba a ser operado de urgencia tras haber sido encontrado esa madrugada tirado en las vías de una estación de Milán después de haber estado en una discoteca a la que habían acudido los jóvenes. Ahora quieren saber qué pasó.