Suspendido el rescate de los montañeros fallecidos en Picos de Europa hasta mañana

A pesar de la adversa situación meteorológica, el dispositivo se reanudó la mañana de este miércoles con la primera luz del día con la esperanza de que en algún momento pudiera haber alguna «ventana» en la climatología para volar los helicópteros y poder evacuar por aire los cuerpos.

Los montañeros fallecidos fueron encontrados el martes por la tarde en la zona conocida como vira de escape del Espolón de El Jiso, un lugar que la Guardia Civil califica de «extrema dificultad» debido a las condiciones de la montaña y el mal tiempo. Los cuerpos sin vida de los tres hombres, de 19, 21, y 46 años, estaban equipados y encordados, y no hay todavía versión oficial de las causas del accidente, la cual será investigada por la Guardia Civil. Si los agentes los pudieron encontrar allí ha sido gracias a una foto que habían enviado a sus familias en las que se veía la zona de escalada de El Espolón. Después se localizó el coche en el que se habían desplazado en la zona oriental de los Picos. Desde allí comenzó la búsqueda hasta que el martes a las 18.00 horas se confirmaba el fatal desenlace.

El tiempo, peor que el martes

El martes a media tarde se tuvo que suspender el operativo porque el helicóptero no podía tomar vuelo hasta las cumbres. Y hoy la situación ha empeorado. La cota de nieve ha bajado, en los llanos llueve, la visibilidad es casi nula... El corresponsal de El Diario Montañés en Liébana, Pedro Álvarez, describe un panorama «peor que el de ayer. Anoche nevó, está lloviendo, la temperatura se ha desplomado y no se ve nada. Es muy difícil que el helicóptero pueda entrar ahí».

A pesar de las adversidades, diez agentes del Greim se pusieron en marcha a primera hora. Hay dos helicópteros movilizados. Si no pueden volar, ellos van a pie. No se sabe todavía si se podrá llevar a término la evacuación aérea debido al mal tiempo. Quizá mañana, jueves, las condiciones mejoren. En caso de que no haya tregua, los cuerpos serían porteados por los agentes por tierra hasta algún punto accesible para vehículos, desde donde serían trasladados por carretera hasta el hospital Valdecilla.

Los agentes del Greim que participan en el operativo pertenecen a los puestos de Potes y de Cangas de Onís. En cuanto a los dos helicópteros preparados para intervenir, uno (con base en Asturias) está esperando en Potes y otro (con base en León) aguarda en Fuente Dé. En cuanto el tiempo lo permita, volarán hasta la zona para evacuar los cuerpos de los montañeros que, previamente, habrán sido preparados por los agentes para el izado a la aeronave. Ambos helicópteros son muy pequeños, con capacidad para un solo cuerpo. Tendrían que hacer tres viajes.

Consternación en Zamora

El martes por la tarde el mal tiempo fue el que impidió llevar a término el rescate. A las siete se decidía posponerlo hasta hoy, miércoles, mientras en Zamora conocían el triste desenlace de la búsqueda de sus tres vecinos: Fernando Casquero (46 años), Daniel Camarzana (21) y Rubén González (19). La unidad especial del Greim, formada por seis hombres, estaba buscando al grupo, que llegó durante el fin de semana procedente de Zamora después de recibir el aviso de los familiares de las víctimas al comprobar que habían perdido el contacto.

La consternación era el martes absoluta en la sede de la asociación montañera a la que pertenecían, situada en la avenida Víctor Gallego. Hasta allí se desplazaron psicólogos de Emergencias de Castilla y León para atender emocionalmente a los familiares y amigos de los tres escaladores.

Localización de los cadáveres

La localización de los cadáveres se produjo el martes alrededor de las 18.00 horas en la zona media de la pared vertical, en un paraje conocido como Los Costillares. Al parecer, el accidente se produjo a 150 metros de la cima y cayeron otros tantos. Aunque todavía no se ha confirmado este extremo, se piensa que el fallecimiento se pudo producir debido a un fallo en las cuerdas que utilizaban para realizar el ascenso a la cima de 2.173 metros de altitud.

A partir de ese momento, cuando el Greim logró alcanzar visualmente a los escaladores, comenzó el operativo para recuperar los cadáveres, pero fue imposible debido a las condiciones meteorológicas y a la falta de luz por la llegada de la noche, así que alrededor de las 19.00 horas se tomó la decisión de suspender las labores hasta hoy.

Fue precisamente la espesa niebla que había en el momento en que fueron localizados los tres montañeros lo que impidió que el helicóptero de la Guardia Civil trasladado hasta el lugar se acercara hasta el punto exacto en el que se encontraban. De hecho, el aparato voló hasta un lugar muy próximo, el entorno de La Cueva del Espolón del Jiso, pero finalmente y para evitar riesgos se decidió movilizarlo en los prados de Áliva. Sólo se podía acceder escalando, tal y confirmaron los intervinientes.

A pesar de que era imposible por las dificultades del terreno portar a los fallecidos a pie hasta una zona segura, los seis agentes del Greim continuaron el camino con la intención de llegar hasta el punto exacto en el que se encontraban los cuerpos de Fernando Casquero y Daniel Camarzana y Rubén González. Lo consiguieron, y gracias a ello llevaron a cabo las labores de identificación.

«Tenían conocimientos mucho más que de sobra para poder meterse en las vías que pretendían hacer. Más que suficientes. Especialmente Fernando, que contaba con experiencia contrastada. Había estado en Los Alpes y vías de todo tipo. Los otros dos chicos llevaban menos tiempo, pero también estaban capacitados», explicó ayer a este periódico José Tomás Santiago, presidente de la Asociación de Montaña de Zamora (AMZ), institución a la que pertenecían los fallecidos y de la que Casquero había sido presidente. De hecho, fue el máximo responsable de esta asociación el que recibió el triste encargo de comunicar la noticia del fallecimiento a una parte de los familiares de los fallecidos.

«Esperemos que mañana (por hoy) les rescaten y a partir de ahí imagino que se siga el procedimiento habitual y se traigan los cadáveres a Zamora. Que vengan a casa lo antes posible», detalló visiblemente afectado el máximo responsable del grupo de montaña. A última hora de ayer pudo concretar que miembros de la AMZ y seres queridos de los escaladores se desplazarán durante esta jornada hasta Liébana para seguir desde el terreno las labores del Greim y del resto de equipos de rescate que intervengan en la operación.

El Espolón de El Jiso

El Espolón de El Jiso, una de las paredes verticales más clásicas del Macizo Oriental de los Picos de Europa, presenta puntos concretos de gran dificultad, especialmente para personas que no han realizado antes la ascensión. Dada el conocimiento de la montaña de los tres fallecidos, José Tomás Santiago considera difícil que el suceso que acabó con la vida de sus compañeros se debiera a una imprudencia. Aunque tiene detalles de cómo se produjo el accidente, «por respeto a las familias» y porque en la asociación estaban «desbordados» por las llamadas y las muestras de pésame y cariño a última hora de ayer, el presidente de la AMZ prefirió esperar a la versión oficial de la Guardia Civil.

A falta de una explicación definitiva, la hipótesis que manejan los agentes es que en un momento de la escalada, uno de los componentes del grupo cayera al vacío arrastrando a sus dos compañeros, sin que los anclajes del punto de reunión aguantaran el peso. Es decir, que se produjo lo que en el argot de la montaña se conoce como efecto cremallera. Al fallar uno de los puntos de apoyo, el siguiente no fue capaz de aguantar anchado al verse sometido de forma imprevista a una gran fuerza y también se desprendió. Y así sucesivamente.

Tras la llamada de emergencia de las familias, los efectivos de la Guardia Civil encontraron el vehículo de los montañeros zamoranos en el aparcamiento de Áliva en la madrugada del lunes al martes. Fue en ese momento, después de varias horas sin saber nada de ellos y al confirmar que permanecían en la montaña que pretendían escalar, cuando sonaron las alarmas. Según la prensa local de Zamora, el último contacto de los familiares con las tres víctimas de este accidente de montaña ocurrido en el Espolón de El Jiso también conocido como Pico Pozán se produjo por vía telefónica el sábado, poco después de llegar a Liébana.

Durante las labores de rescate, además de la meteorología y la falta de visibilidad, el equipo del Greim se encontró con dificultades de comunicación. De hecho, los seis agentes que se aproximaron al punto donde se habían localizado los cuerpos en el Espolón de Jiso perdieron en algunos momentos la comunicación con la base de Potes, donde otros miembros de la Guardia Civil permanecían en alerta por si fuera requerida su inmediata intervención. Finalmente, no fue necesario y prefirieron prepararse para el día de hoy, cuando está previsto que se recuperen los cadáveres.