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Un niño hace deberes en clase.

Una mujer maltratada pide ayuda a través de una nota de socorro que metió en los deberes de su hijo

Una profesora del colegio, en Benalmádena, avisó a la policía, que organizó una tutoría para que los padres acudieran al centro y así conocer la versión de la víctima

elcorreo.com

Miércoles, 4 de mayo 2016, 09:54

Una mujer ha conseguido poner fin al supuesto calvario que vivía en su casa gracias a una nota de socorro que introdujo en los deberes que su hijo debía entregar al día siguiente en el colegio, situado en Benalmádena. Su marido, de 52 años, ha ... sido detenido por un presunto delito de violencia de género. Aunque quedó en libertad, el juzgado lo mantiene bajo control telemático y ha dictado una orden de protección para la víctima, según confirmaron fuentes de la Subdelegación del Gobierno.

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La actuación policial se desarrolló el pasado día 18 de abril, cuando una profesora del centro educativo encontró en el cuaderno de uno de sus alumnos la nota que supuestamente había escrito la madre de éste. Un grito desesperado de auxilio que fue atendido por los responsables del colegio, que avisaron inmediatamente a la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía en la localidad malagueña.

Los agentes idearon un plan, en el que contaron con la complicidad del centro, para atraer a la pareja sin levantar sospechas. Los profesores convocaron a los padres a una tutoría para hablarles de su hijo, según explicaron desde la Subdelegación. Sin embargo, cuando acudieron al colegio, se las ingeniaron para que sólo entrase ella. Una vez a solas, le preguntaron por la situación que estaba viviendo en su casa.

Maltrato físico y psicológico

Los agentes de la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional detectaron en su relato indicios de posibles malos tratos físicos y psicológicos, por lo que arrestaron al marido de la víctima y, tras instruir las diligencias, lo pusieron a disposición de la autoridad judicial.

La mujer supuestamente era sometida a una constante vigilancia y control por parte de su pareja que derivaba en una situación de reclusión en el domicilio familiar, según informó ayer ABC. No sólo le habría impedido salir a la calle, sino también tener teléfono móvil o acceder a las redes sociales. Al parecer, las vejaciones y humillaciones habían dado paso en ocasiones a la violencia física.

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