Borrar
Imagen del vertedero de Seseña.
Las otras 'Seseñas' de los neumáticos

Las otras 'Seseñas' de los neumáticos

Greenpeace denuncia que la mitad de las 300.000 toneladas de residuos de caucho generadas al año en España se queman en cementeras y exige más reciclaje

José Mari Reviriego

Miércoles, 25 de mayo 2016, 00:58

El incendio del vertedero de neumáticos de Seseña ha sacado a la luz el descontrol que existe en España en el almacenaje y tratamiento de este tipo de residuos, foco potencial de peligros para el medio ambiente y la salud de las personas. Pese al colosal volumen de desperdicios de gomas y cauchos que genera al año la industria de la automoción alrededor de 300.000 toneladas, la Administración desconoce el número exacto de 'cementerios' que funcionan en la actualidad, bien con licencia o sin ella, según denuncia Greenpeace. «Esperemos que el desastre de Seseña sirva de punto de inflexión», declara Julio Barea, responsable de campaña de la asociación ecologista.

Los neumáticos usados tienen dos destinos finales. Por un lado, la mitad de los desperdicios se reciclan en material para asfaltado, pavimentos de zonas de juegos infantiles y suelas de calzado. Incluso, se extrae el acero de las gomas de los camiones para la elaboración de cubiertos. El resto de los residuos, alrededor de 150.000 toneladas, se queman. Barea denuncia que la mitad de los residuos se incineran en los hornos de cementeras tras la caída de la producción de hormigón. Estas son algunos datos reveladores sobre la contaminación, el tratamiento y la reutilización de los neumáticos.

¿Cuántos cementerios de neumáticos operan en España?

Nadie lo sabe con exactitud. A raíz del incendio de Seseña han salido a la luz algunos, legales e ilegales. Fuerteventura tiene uno en Puerto del Rosario. En Cervera del Llano, un pueblo de Cuenca, hay otro. Y en Castellanos de Villiquera, en Salamanca. Se está hablando de una quincena de vertederos bajo la sombra de la clandestinidad.

Los vertederos no están impermeabilizados

Aunque no ardan, ya están contaminando. Los neumáticos tienen unas 200 sustancias químicas. A la intemperie, expuestos al sol y la lluvia, generan contaminación en las aguas y en los suelos por la acción de los hidrocarburos aromáticos policíclicos, entre otros elementos. Son vertederos sin cunetas para recoger los lixiviados. Además, no están impermeabilizados. Seseña ha puesto de manifiesto lo que supone tener almacenados sin control este tipo de residuos.

Desprenden elementos tóxicos si arden sin control

Con el fuego sueltan elementos muy tóxicos y persistentes. Las ruedas antiguas llevan 'pcbs', bifenilos policlorados. Emiten dioxinas, uranos, metales pesados y la famosa carbonilla muy fina. Muchos de estos elementos son nocivos para la salud, incluso cancerígenos. Hablamos de mercurio, benzeno, tolueno, furanos...

Solo se pueden recauchutar una vez

Lo más adecuado sería reutilizarlos lo más posible. ¿Cómo? Los neumáticos se pueden recauchutar, reutilizar. Desgraciadamente, las ruedas de los vehículos de turismo tienen materiales textiles y componentes de peor calidad y más blandos. Solo se pueden recauchutar una sola vez. Los de camión, tractor y avión se pueden reutilizar varias veces en la industria.

La competencia de las marcas asiáticas

Buena parte de lo recauchutado se exporta. No hay mercado en España. En el mercado europeo han entrado gran cantidad de marcas asiáticas que han tirado por los suelos los precios de los neumáticos nuevos. Por eso, no compensa recurrir al recauchutado. El consumidor prefiere comprar uno nuevo.

Reciclados en pavimento, suelas y cubiertos

Los que no se pueden reutilizar o los que tienen más goma, como los neumáticos de los camiones, se usan en su segunda vida para pavimentos, asfaltados, parques infantiles, guardarraíles o suelas de zapatillas, entre otros usos. Para sustituir el coke del petróleo o el carbón también se usa el neumático picado como combustible. El acero de los neumáticos grandes de los camiones, que es de gran calidad, se retira y se lleva a fábricas de cuberterías.

300.000 toneladas de neumáticos al año

Es la cifra de desperdicios generada anualmente en España, demasiada para la demanda que hay en la industria del reciclaje. El 50% de esas 300.000 toneladas se quema en cementeras o en incineradoras. El problema son los humos. Hay 19 cementeras que tienen autorización para quemar de forma controlada estos neumáticos, con lo cual están saliendo a la atmósfera esos elementos, aunque las empresas sostienen que aplican filtros y que la quema a altas temperaturas no genera problemas. Es un negocio muy boyante porque las cementeras han dejado de fabricar cemento y su principal actividad es la incineración de residuos. El problema para Greenpeace es que tenemos hoy 19 pequeñas 'Seseñas' en España.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Las otras 'Seseñas' de los neumáticos