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elcorreo.com
Jueves, 25 de febrero 2016, 16:49
Un empleado del matadero Le Vigan, en Francia, ha sido grabado a través de una cámara oculta, cuyas imágenes registradas muestran acciones tan crueles como el aplastamiento de un cordero, las risas de este trabajador mientras golpea a los animales con un bastón eléctrico o la muerte por desangramiento de cerdos que ni siquiera han sido aturdidos con anterioridad.
El Gobierno francés ha anunciado que tomará medidas contra este matadero que, precisamente, está certificado como ecológico. El ministro de Agricultura, que ha calificado esta práctica como «intolerable», asegura que se ha iniciado una investigación para determinar las condiciones en las que se encuentran los animales y las prácticas a las que los someten.
La Confederación Francesa de Carnicería, por su parte, acusa al «consumo irracional» de provocar este tipo de actividades en los mataderos y afirma que «la industrialización de la carne se traduce en estos abusos». Al parecer, la cámara oculta fue instalada por la organización L214 a raíz de un caso similar ocurrido en el matadero municipal de Ales. El vídeo de cuatro minutos es de una crudeza incalificable (advertimos de que las imágenes pueden herir su sensibilidad). «Los animales mueren sufriendo. La carne feliz no existe», dicen portavoces de esta organización, haciendo alusión a que el matadero Le Vigan estaba certificado como «ecológico».
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