El detenido en San Francisco escupió al ertzaina y dijo que tenía coronavirus, según el atestado

Según ha podido saber este periódico, en el atestado policial se explica que el individuo que fue sancionado este domingo por incumplir el confinamiento en el barrio bilbaíno de San Francisco, se negó en tres ocasiones a identificarse y a la cuarta, lo hizo verbalmente, es decir que no exhibió ninguna documentación. Después, se bajó el calzoncillo y el pantalón delante de los dos ertzainas. Cuando los agentes le registraron, se incautaron de varias tarjetas de crédito a nombre de otras personas, que según alegó eran familares suyos, aunque este extremo no se ha podido comprobar.

Los policías conocían al individuo como un habitual de la zona. Según se refleja en el atestado, el momento de mayor tensión se vivió cuando el joven, de 22 años, se acercó a uno de los uniformados a unos 20 centímetros de su cara y le escupió asegurando que estaba infectado de coronavirus. Fue entonces cuando se inició un forcejeo. Uno de los grupos de trabajo de la comisaría de la Ertzaintza en Bilbao tiene a 40 agentes de baja con síntomas de Covid-19. Dos de ellos están ingresados, uno con sedación en una Unidad de Cuidados Intensivos, lo que está afectando al ánimo de toda la plantilla, indican fuentes internas.

Según la versión policial, la madre del detenido intentó impedir la detención y agredir a los ertzainas, por lo que también fue arrestada. Ambos fueron acusados de los delitos de desobediencia y atentado a la autoridad, y tras pasar por comisaría han quedado en libertad. El arrestado mantuvo su actitud retadora en los calabozos, por lo que no se le pudo hacer la reseña y la abogada defensora rehusó asesorarle en ese momento, indican las mismas fuentes.

Uno de los ertzainas resultó lesionado en un ojo y en el hombro por la lejía y una especie de compuesto químico que les arrojaron desde las ventanas.