Unai Rementeria ha abandonado su plaza como funcionario en la sociedad foral Azpiegiturak para convertirse en el nuevo presidente de Elkarkidetza, la entidad de previsión social voluntaria que se ofrece a funcionarios forales y municipales para que complementen sus futuras pensiones. Se trata de un ... cargo de designación política al que el ex diputado general llega a propuesta del nuevo Gobierno vizcaíno que lidera su sucesora, Elixabete Etxanobe.
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Tras ocho años al frente de la Diputación y otros dos como portavoz de la institución, Rementeria anunció que no se iba a presentar a la reelección en las elecciones forales celebradas el pasado mes de mayo. Cedió la makila a Etxanobe y abandonó la primera línea política para volver a sus labores como letrado de la administración vizcaína, en el puesto que ocupaba antes de ostentar cargos públicos.
Reingresó en Azpiegiturak en septiembre, y apenas un mes después el Consejo de Gobierno del Ejecutivo vizcaíno puso su nombre sobre la mesa para sustituir al frente de Elkarkidetza a Karmelo Sainz de la Maza, exalcalde de Leioa y expresidente de la Asociación de Municipios Vascos (Eudel), que se jubila tras algo más de una década en el cargo. La Diputación destacó el «buen hacer, la plena confianza y la validez» de Rementeria para explicar su elección.
Fue la junta directiva de la EPSV la que nombró definitivamente al exdiputado general como nuevo presidente el mes pasado, según adelantó el día de Navidad 'ElDiario.es'. Este periódico ha podido confirmar la designación oficial, que no se ha hecho pública y ni siquiera aparece en la página web de Elkarkidetza, y que el nuevo cargo requerirá una dedicación exclusiva a Rementeria que le obliga a dejar Azpiegiturak. Históricamente la propuesta foral es aceptada por la EPSV, mientras que la vicepresidencia de la entidad la deciden los trabajadores. Hasta ahora la ocupaba una representante de ELA.
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Aunque los estatutos de Elkarkidetza no contemplan que se retribuya a los miembros de su junta directiva, sí dejan la puerta abierta a hacerlo en ciertos casos. Uno es el del presidente, cuyos emolumentos fueron calificados en 2012 por CCOO como «excesivos» al considerar que se trata de un cargo «honorífico». No existen tablas salariales ni dotaciones presupuestarias en los presupuestos de la EPSV, pero las fuentes consultadas advierten de que se trata de un salario «elevado» propio de un alto cargo.
Elkarkidetza no informa del sueldo... y tampoco la Diputación. La semana en la que se conoció su designación como candidato al puesto EH Bildu registró una pregunta en las Juntas Generales en la que solicitaba al Gobierno vizcaíno que aclarara cuánto iba a cobrar el antiguo mandatario foral en su nuevo puesto. En la respuesta la administración asegura que no es una cuestión que pueda o deba contestar ya que el nuevo cargo de Rementeria queda fuera de su organigrama.
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