PNV y PSE rechazan acometer una reforma fiscal en Bizkaia y PP les reclama una propuesta este año

El pleno de las Juntas Generales de Bizkaia ha debatido este miércoles una moción del PP que pedía a la Diputación que presente una propuesta de reforma fiscal para su entrada en vigor el 1 de enero de 2022 para hacer que Bizkaia sea «un territorio atractivo para la inversión y la actividad económica».

Con este mismo objetivo, reclamaba «corregir las debilidades» del actual modelo con «una estrategia industrial rigurosa», avanzar en un marco regulatorio que facilite y promueva la creación de empresas, y realizar una política de infraestructuras y peajes que contribuya a la competitividad. La iniciativa ha sido rechazada al votar en contra los dos partidos que conforman el Gobierno foral, PNV y PSE, y los otros dos partidos de la oposición, EH Bildu y Elkarrekin Bizkaia. Esta última formación ha presentado una enmienda, que no ha sido aceptada por el grupo proponente.

La portavoz del PP, Amaya Fernandez, ha defendido la necesidad de impulsar un modelo «atractivo» para la actividad económica y la inversión, en un «escenario de globalización» y en el que la pandemia de covid-19 ha supuesto «un acelerador de grandes cambios». Para ello, ha subrayado que la fiscalidad es «una herramienta clave» y, tras apostar por una reducción de impuestos, ha instado a «optimizar» el Concierto.

Fernández, que ha lamentado la «autocomplacencia» de la Diputación, ha pedido que la política industrial pase de «ser la nostalgia del pasado a una forma determinante de construir nuestro futuro». En esta línea, ha abogado por un marco regulatorio que «remueva obstáculos» para la creación de empresas y un «cambio de planteamiento» en la política de peajes.

La iniciativa del PP ha sido enmendada por Elkarrekin Bizkaia, que ha dicho compartir algunos puntos pero ha lamentado que insta a «ser más audaces en el neoliberalismo». Su juntero Israel Escalante ha defendido que la fiscalidad debe servir para «reequilibrar las desigualdades sociales» y no para «atraer financiación de las élites». El objetivo de la fiscalidad, ha remarcado, debe ser que «nadie se quede atrás».

Asimismo, ha planteado que la reindustrialización debe impulsarse «con un control público» y ha apuntado que, «más allá de creación de empresas, se echa en falta un seguimiento de empresas» para que se mantengan en funcionamiento y con «buenas condiciones laborales». En materia de infraestructuras, ha reclamado que se tenga en cuenta Agenda 2030 y la «emergencia climática» y se analice «lo que existe para racionalmente planificar».

La portavoz de EH Bildu, Bea Ilardia, ha subrayado que se necesita una reforma fiscal pero para contar con un modelo «progresivo y justo», algo que, a su entender, no sucede con el actual. En la misma línea, ha considerado que la moción del PP «desprende una concepción liberal».

Ilardia ha reivindicado que la política industrial debe pasar por detectar y «corregir las debilidades» actuales y «adelantarse» desde un «liderazgo público». También ha subrayado que «volver a reivindicar una política desarrollista» en materia de infraestructuras «es anacrónico». A su entender, frente a «infraestructuras faraónicas», se debe apostar por la cohesión del territorio.

Desde los grupos del Gobierno foral, el apoderado del PNV Gaizka De Luis ha afirmado que su grupo no considera «necesaria» una reforma fiscal este año, tal y como proponía el PP. De este modo ha defendido que es momento de continuar trabajando en la línea de las medidas que se han ido poniendo en marcha por la Diputación para «aliviar las dificultades» que están sufriendo en el territorio tanto los ciudadanos como las empresas, «alineados» con los ODS de Naciones Unidas y no con «una reducción de tipos impositivos que aumenten la desigualdad social».

De Luis ha reivindicado «un modelo justo» para «crecer con principios y no a cualquier precio». «Nuestro modelo funciona», ha asegurado el juntero, que ha subrayado que ya hay una estrategia industria «perfectamente definida» y ha reivindicado el modelo de peajes que defiende la Diputación y que es «un sistema altamente implantado en toda Europa que se ha demostrado eficaz y va a contribuir a reducir los actuales desequilibrios».

Por su parte, el portavoz del PSE, Juan Otermin, ha advertido al PP de que la capacidad de atracción y la competitividad «no obedecen exclusivamente» a la fiscalidad. Asimismo, ha defendido que la política fiscal debe ser «una herramienta de redistribución y solidaridad para el sostenimiento de políticas públicas para luchar contra la desigualdad y garantizar unos servicios públicos de calidad y un sistema de protección social que atienda a los que más ayuda necesitan».

Tras remarcar que la Diputación «ha propuesto y seguirá proponiendo a esta Cámara medidas tributarias» para intentar paliar el efecto de la crisis por la pandemia, ha recordado, en materia industrial, que el Gobierno Vasco ha aprobado el Plan de Desarrollo Industrial e Internacionalización 2021-2024, en cuyo diseño y definición han participado las diputaciones.