T. basterra | a. Cárcamo
Viernes, 21 de octubre 2022, 01:25
La detenida por secuestrar a un bebé el miércoles en el hospital de Basurto «lo había estado intentando esa noche en otras habitaciones». Así lo confirmaba este jueves el consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, y así lo han relatado a EL CORREO tres familias, que ... aseguran que estuvo «entrando y saliendo» de diferentes estancias del pabellón Iturrizar al menos desde las seis y media de la tarde. Raptó al niño a las 21.00 aproximadamente.
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Según uno de los afectados, al que la Ertzaintza «tomó declaración ayer por la noche», eran «sobre las 18.30 horas» cuando la mujer accedió, «sin llamar y sin presentarse», en la habitación en la que se encontraban su mujer y su suegra. Lo hizo con el pretexto de que «tenía que llevarse el niño para hacer un pesaje». «Mi chica, que es enfermera, le comentó que ella no podía acompañarle porque estaba operada, pero que iría su madre», explica. La joven le contestó que «no podían ir con ella». «No te llevas al niño si no vamos con él», zanjó la amatxu.
La presunta secuestradora le trasladó que «iba a preguntar» y regresó un cuarto de hora después, momento en el que les repitió que «no podía acompañar nadie al bebé». Se negaron de nuevo y le puntualizaron que «nos habían dicho que, si el bebé sale de la habitación para someterse a alguna prueba, siempre tiene que estar acompañado por alguien de la familia».
La supuesta sanitaria se fue, pero algo más tarde realizó un tercer intento y les dio un ultimátum: «O se le hace el pesaje ahora o no se le hace». La madre le reiteró que, «si el niño no está acompañado, no va a ningún sitio», y se marchó. La situación no le resultó «demasiado extraña» porque la joven «hablaba de forma muy técnica», no daba la impresión de que fuera alguien ajeno al hospital. Aunque sí sorprendió su «insistencia» y le contó lo sucedido «a algún enfermero o enfermera, pero no sé a quién porque por aquí pasa mucha gente», precisa el padre. «La verdad es que están a tope de trabajo, no dan abasto», defiende al personal.
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La detenida, que «estuvo rondando de un lado a otro» también lo intentó en la habitación de la mujer de David Tejerizo, que ha dado a luz a gemelas. «Asomó la cabeza y se fue. Yo creo que no entró porque mi mujer estaba con su abuela y, al ver que estaba acompañada, se fue a por otra», reflexiona. Es consciente de que, «si hubiera estado sola, igual nos hubiese podido pasar esto a nosotros; en momentos como este las madres están cansadas, sin dormir... y nadie piensa en esas cosas».
Este bilbaíno está convencido de que «sabía lo que hacía, lo tenía bien estudiado, porque todo el mundo no sabe dónde está la ropa de médico y consiguió salir del hospital sin ser vista». Una tercera familia se sorprende de que «nadie se diera cuenta de que había una extraña, no repararan en que no la conocían». En este caso, la madre «ha tenido complicaciones y lleva un mes ingresada», por lo que su bebé «está desde hace tiempo en casa». Cuentan que la mujer «entró en la habitación y dijo: 'uy, perdón, me he equivocado' y se fue». En ese momento no le dieron ninguna importancia, aunque ahora son conscientes de que «se marchó porque no había ningún niño».
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El suceso, pese al final feliz, ha sacudido la maternidad, donde los padres de otros bebés celebraban la rapidez con la que el niño ha sido localizado y, sobre todo, que «está bien». Aunque no esconden la «ansiedad» que les ha generado un suceso que «piensas que solo pasa en las películas».
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