El saharaui 'atrapado' en Loiu queda en libertad pero sin regularizar su situación

Youssef Mahmoudi, el joven saharaui que permanecía 'atrapado' en el aeropuerto de Loiu desde el 24 de junio al denegársele el asilo político que había solicitado por razones «humanitarias» y de «seguridad», quedó en libertad la madrugada del viernes al sábado. Aunque su situación sigue sin regularizarse y a expensas de los movimientos jurídicos y políticos que se vienen sucediendo, un juzgado de primera instancia de Bilbao le ha autorizado a abandonar 'La Paloma' y moverse libremente. La jornada de ayer descansó en el domicilio de unos conocidos.

Mahmoudi llegó en un vuelo procedente de Marruecos. En el puesto fronterizo de Loiu se constató que no tenía el pasaporte sellado para poder realizar el viaje, lo que indicaba, según las fuentes policiales, la posibilidad de que hubiera accedido al avión en el país africano saltándose las medidas de seguridad. Fue retenido, así que el joven, que tiene 20 años y es estudiante de Derecho, hizo una petición oficial de asilo político. Mientras se aclaraba su futuro, fue enviado a la Sala de Inadmitidos del aeropuerto, donde se puso en huelga de hambre a modo de protesta.

A lo largo de esta semana los hechos se han ido sucediendo mientras el saharaui seguía en Loiu. El miércoles el Ministerio del Interior denegó la solicitud de asilo al considerar que no cumple los requisitos mínimos y el jueves la Audiencia Nacional dio luz verde a su deportación. Para entonces, diferentes colectivos sociales vascos y la comunidad saharaui ya habían empezado a movilizarse solicitando que Mahmoudi fuera «liberado». El viernes, cuando parecía que su vuelta a Marruecos era un hecho, el piloto que debía trasladarle en un vuelo regular se negó a hacerlo alegando motivos de seguridad. La nueva previsión era que saliera de Bilbao a Tánger en otro vuelo programado para esta tarde.

Ante este panorama, la Policía Nacional solicitó el viernes por la tarde al juzgado de guardia de Bilbao que prorrogara 48 horas la estancia del joven en el aeropuerto. El presidente de la asociación Zehar-Errefuxiatuekin, que está prestando ayuda al chico y a los dos abogados que le asisten, Javier Galparsoro, aseguró ayer durante una comparecencia que la intención era «trasladar al chico a un centro de internamiento para extranjeros (CIE) donde se interna a las personas que van a ser deportadas por vía de expulsión».

Mahmoudi fue trasladado al juzgado para que una jueza le tomara declaración. Tras escucharle, la magistrada decretó su puesta en libertad de madrugada, por lo que el joven volvió al aeropuerto a recoger sus pertenencias y salió luego de la terminal con total normalidad. Pero en la reunión no estuvo representada la Fiscalía, que tiene tres días de plazo para recurrir la decisión de la jueza.

El saharaui ahora mismo no tiene papeles, así que depende de cualquier decisión administrativa que pueda tomarse. Youssef confía en lograr el asilo político, regularizar su situación y quedarse en España, según confesó ayer en una entrevista que concedió a ETB junto a un amigo también activista saharaui que fue condenado en Marruecos y obtuvo el asilo en 2016.

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