La DGT premia a Alfonso Gil por limitar la velocidad a 30 por hora en Bilbao

La limitación de velocidad en todas las calles de Bilbao entró en vigor el pasado 22 de septiembre. La medida fue muy bien recibida por ciclistas y víctimas de accidentes y con muchas reticencias por parte de asociaciones de automovilistas, consumidores, taxistas, repartidores... Pese a reconocer que todos los cambios «suelen provocar una reacción adversa», el edil del PSE anunció que buscaba reducir con esta medida el ruido, los atropellos y las emisiones contaminantes.

El director de la DGT, Pere Navarro, ha elogiado en numerosas ocasiones las políticas de movilidad desarrolladas en la capital vizcaína. Con todo, no parece haber alterado la vida de la ciudad. También es cierto que, según los taxistas, esa normalidad con la que ha sido recibida la restricción tiene más que ver con la relajación en su cumplimiento que con su real potencial para condicionar la circulación cuando realmente se circule a 30. Alfonso Gil siempre ha sostenido que en ningún caso el Ayuntamiento pretendía con esta normativa recaudar dinero ni tampoco «prohibir el uso del coche».