Damborenea impulsa la candidatura de Nerea Llanos para liderar el PP vizcaíno

Este movimiento pone fin a semanas de especulaciones sobre el futuro del actual presidente y de cómo iba a reaccionar ante las demandas de renovación procedentes del sector alternativo vizcaíno -radicado sobre todo en Barakaldo y Getxo- e incluso desde la dirección regional encabezada por Alfonso Alonso. Tras consultarlo con su círculo de colaboradores más cercano, Damborenea ha decidido renunciar a revalidar su cargo y hacerse a un lado.

El propio Damborenea adelantó ayer por la mañana al presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, su intención de no presentarse y apoyar como candidata a Nerea Llanos. Se da la circunstancia de que el líder de los populares en Euskadi decidió en el congreso regional celebrado en marzo sustituir a Llanos como secretaria general del partido. El puesto lo ocupa ahora Amaya Fernández, cabeza visible del sector crítico vizcaíno. La decisión de Alonso fue interpretada internamente como un guiño al sector contrario a Damborenea. Queda ahora por resolver la incógnita de si el sector cercano a Fernández intentará negociar con Llanos una lista de integración o presentará una plancha independiente en el congreso del 9 de junio.

Alfonso Alonso ha insistido, sin embargo, en los últimos días en que en caso de que se presenten dos planchas a las elecciones en Bizkaia él se mantendrá «neutral». Eso sí, en una entrevista concedida a este periódico «exhortó a los presidentes» territoriales a que traten de «plantear ofertas lo más integradoras posibles». «Y si hay varios candidatos, que no abran divisiones en el partido», reclamó en previsión de que el cónclave de Bizkaia pueda convertirse en una disputa fratricida -las diferencias entre ambos sectores no radican en cuestiones ideológicas o políticas, sino que alcanzan el ámbito personal-.

Revés para Alonso

Para el líder del PP vasco sería un revés político que finalmente concurran dos planchas distintas. Desde que hace de año y medio tomara las riendas del partido tras la abrupta marcha de Arantza Quiroga, una de sus principales obsesiones ha sido la de superar las luchas intestinas que han protagonizado la vida del partido en los últimos tiempos. «Hay que dejar de ser noticia por cuestiones internas» fue la orden que transmitió a su equipo. El objetivo era presentar ante la sociedad a un PP unido y como un bloque, dispuesto a desempeñar un papel relevante y determinante en la vida política vasca.

Según algunas fuentes, Alonso tratará a partir de ahora de facilitar un acercamiento entre ambos grupos y lograr así una única plancha de integración que estaría liderada, según todos los indicios, por Nerea Llanos. Hasta la fecha los contactos han sido mínimos. El sector crítico sí que ha comenzado en las últimas semanas a recabar apoyos y buscar a la persona adecuada y con peso entre la militancia para encabezar su candidatura.

Todas las incógnitas quedarán resueltas a lo largo de los próximos diez días. El 9 de mayo finaliza el plazo para la presentación de candidaturas -que deberán estar respaldadas por 75 avales- y para esa fecha se sabrá si ha habido acuerdo o no. La decisión final sobre quién será el nuevo presidente del PP de Bizkaia llegará de la manos de los afiliados, que podrán participar en el congreso con sólo inscribirse previamente.