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Miércoles, 12 de abril 2017, 09:15
«Gracias por las muestras de cariño: las políticas, las de los amigos, las espontáneas tan mágicas como esta en el portal de su casa, las de sus votantes, fans, seguidores, socialistas. A todos Perdón por las llamadas no contestadas, aunque su pérdida no me ... deja hablar. Nos queda el consuelo de saber que vivió intensamente, y que nos dejó muy feliz, estaba en su mejor momento personal, laboral y sentimental. Te quiero, Carme y cuidaré de él. Eres muy grande, me has dejado muy sola. Intentaré ser la mitad de luchadora que tú». Se trata del emotivo mensaje que Mireia, la hermana de Carme Chacón, ha utilizado para despedirse de ella a través de Instagram.
Madre de tres niños y odontóloga de profesión, Mireia Chacón ha querido resaltar que ella cuidará al pequeño Miquel, de 8 años -cumple 9 el próximo 19 de mayo-, fruto del matrimonio de la política socialista con el empresario y periodista Miguel Barroso entre 2007 y 2016. «Cuidaré de él. Eres muy grande. Me has dejado muy sola. Intentaré ser la mitad de luchadora que tú», ha escrito Mireia en su perfil de Instagram.
Las dos hermanas se llevaban solo dos años de diferencia y al margen de su parentesco también eran «mejores amigas». Tanto es así que hasta tuvieron los hijos casi a la vez. Miquel, hijo de la exministra, comparte años con uno de sus tres primos.
En los últimos días, la residencia de Carme Chacón en la madrileña calle Viriato es un pequeño homenaje a la política catalana. Allí, unas velas iluminan una pequeña nota que reza: «Con cariño para la familia Chacón. Lo sentimos» Es el mismo lugar en el que los servicios de emergencia certificaron su muerte el pasado domingo.
Esplugues despide a Carme
En Esplugues de Llobregat nació hace 46 años Carme Chacón, allí dio sus primeros pasos en la política, como concejal, y allí fue despedida este miércoles la exministra de Defensa, fallecida el domingo pasado en Madrid por un problema coronario.
La dirigente socialista hizo buena parte de su carrera política en la capital española, pero la gente de su pueblo, Esplugues, le tenía un gran cariño, como se demostró con las largas colas que se formaron ayer frente al consistorio barcelonés, donde se expuso la urna con las cenizas de la exministra, para que sus paisanos, sus correligionarios y la política catalana en general le diera un último adiós.
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