El Foro Social ve cerca el desarme total de ETA y la destrucción de sus armas

Desde el Foro Social volvieron a hacer un llamamiento hoy a los gobiernos español y francés a «poner fin a la situación de bloqueo» y su actitud, han lamentado, «irresponsable», al tiempo que confiaron en que la nueva situación política en Madrid, sin mayorías absolutas, pueda cambiar la actual situación. «Esperamos que las fuerzas políticas sean más sensibles», han expresado.

Desde el Foro Social han valorado, asimismo, de forma positiva, el documento presentado por el colectivo de presos de ETA, EPPK, respecto a la reinserción. Lo han hecho durante la presentación del IV Foro Social que se celebrará los próximos 10 y 11 de marzo en San Sebastián y Hendaia y que buscará dibujar una hoja de ruta para «facilitar la integración de las personas presas y huidas».

En dicho texto se propone a los reclusos «utilizar las diferentes posibilidades existentes en el ámbito jurídico» para «vaciar las cárceles», aunque «con los límites del arrepentimiento y la delación».

«Poner las armas en manos de la sociedad civil»

El portavoz del Foro Social Permanente ha afirmado que «es evidente» que, en materia de desarme, se está «mucho mejor que en enero de 2016». En este sentido, ha recordado que ETA, en las cartas que remitió a representantes de «la sociedad civil de Iparralde», en alusión a los detenidos en la operación de Luhuso y posteriormente puestos en libertad, «dio a conocer elementos interesantes: que ha terminado la fase de sellado e inventariado» de las armas «y ha entrado en la fase de su destrucción».

Asimismo, ha destacado que la banda manifestó «su voluntad de dar un nuevo mandato a la Comisión Internacional de Verificación (CIV)» y que estaba dispuesto a «poner las armas en manos de la sociedad civil».

Por ello, se ha mostrado convencido de que se va a entrar «en la fase final» del desarme de ETA «en un plazo razonable». «El concepto de rápido o no rápido es muy personal. Cada uno le pone los meses que estime a esa cuestión», ha subrayado.

Asimismo, recomienda que «el proceso de reintegración se realice por medio de cauces legales, aceptando que el mismo, siendo integral, se debe desarrollar de forma individualizada, escalonada, y en tiempo prudencial».

En su opinión, este proceso requiere «por parte de los presos mostrar su compromiso con el nuevo escenario de paz y renunciar a vías violentas» y tiene que haber «un reconocimiento del daño causado».

También apuesta por que «los presos sean actores activos en el desarrollo del proceso de paz y normalización» y por «estudiar la situación de las personas huidas explorando vías para su integración en la sociedad».