El etarra que mató a 'Yoyes' por reinsertarse pide ahora a los presos que sigan el ejemplo de su víctima

'Yoyes', en este sentido, es un símbolo de las personas que tomaron la decisión personal de abandonar la banda por desacuerdo con la organización pero fueron perseguidas e incluso asesinadas. En el caso de esta mujer, la primera que llegó a la cúpula de la banda, se buscó utilizar su caso como una advertencia para otros etarras que habían insinuado la posibilidad de dejar las armas y regularizar su situación legal. 'Yoyes', que se acogió a la Ley de Amnistía de 1977, había normalizado su situación con los autoridades españolas y volvió a su pueblo, Ordizia. Incluso solicitó permiso para regresar a su casa a la cúpula etarra,que en un primer momento se lo concedió pero luego -en una lucha de poder- ordenó su ejecución. Su asesinato fue utilizado por la banda para cerrar por medio del terror cualquier apuesta por vias individuales tanto de los presos como de los terrorista.

«Vengo a ejecutarte»

El encargado de asesinarla, por orden del jefe etarra Francisco Mújika Garmendia, 'Pakito' fue Antton López Ruiz, 'Kubati'. Este etarra, según se ha sabido, no conocía a su víctima por lo que se acercó a la exetarra durante las fiestas del pueblo, el 10 de septiembre de 1986, y le preguntó: «¿Tú eres "Yoyes"?». Cuando ella dijo que sí, él continuó: «¿Y sabes quién soy yo? Soy un miembro de ETA y vengo a ejecutarte». Al instante le disparó en el tórax y en el muslo. Akaitz,el hijo de tres años de 'Yoyes', presenció el crimen. Kubati sería detenido un año después. Fue condenado a más de mil años de cárcel pero salí en 2013, gracias a la derogación de la denominada 'Doctrina Parot'. Desde entonces, 'Kubati' ha estado presente en algunos actos por los presos organizados por la izquierda abertzale en los que siempre ha mantenido las tesis oficiales de la organización.

En el texto que publica 'Kubati' en el diario 'Gara' no se refiere en ningún momento al crimen de 'Yoyes', pese a que realiza un repaso histórico de la situación del colectivo de presos desde 1977 hasta la actualidad. La tesis del que fuera miembro de ETA es que los presos siempre han tomado la decisión correcta, tanto como cuando se opusieron a las salida individuales -y se llamaba traidores a quienes lo hacían- hasta la hora actual, en la que precisamente las decisiones privadas se consideran la vía prioritaria para la izquierda abertzale, con los únicos límites de la delación y el arrepentimiento. 'Kubati' apuesta ahora por «explorar todas las vías y espacios y acelerar los procesos para acortar los tiempos en todos los terrenos, recorriendo la vía judicial, explotando la legalidad penitenciaria y acogiéndose a todos y todo orden de beneficios penitenciarios de los que el preso pueda servirse». «Adelantar la salida de prisión mediante redenciones es legalidad», escribe.