El obispo de Bilbao: "Los cargos públicos no se deben concebir como cuotas de poder"

El prelado ha sostenido que la iglesia "siempre vive las luces, las esperanzas y las dificultades de la sociedad a la que quiere servir" y, al igual que los sacerdotes y los obispos están "llamados a servir", debe suceder lo mismo en la "comunidad política y en la sociedad". "La vocación -ha apostillado- es servir a la sociedad a partir de unos principios, promover el bien común y la responsabilidad social". En este sentido, ha considerado que "no" se deben concebir los cargos públicos como "cuotas de poder, sino como servicio al bien común y a la dignidad de la persona".

De "cambio sustancial" ha tildado el obispo la situación que actualmente se vive en el País Vasco tras el cese de la violencia de ETA, ya que, según sus palabras, "ha habido una gran evolución social de rechazo a todo tipo de violencia y hay una voluntad muy generalizada de vivir en paz y en convivencia". Ha reconocido que ve el futuro "con esperanza" y "muchísimo mejor que hace unos cuantos años".

Por otro lado, se ha referido al "protagonismo" y a la "importancia" que están adquiriendo "los centros de orientación familiar en la colaboración de las diócesis" y de ahí que, según sus palabras, sea "preciso acompañar a las familias con personal cualificado".

Ha atribuido la falta de vocaciones a "la cultura del individualismo y a la búsqueda de la comodidad", si bien ha abogado por "proclamar la belleza de una entrega estable" que no sólo tiene que ser a la vida consagrada y sacerdotal sino también a "la vocación matrimonial". De este modo, monseñor Iceta ha estimado "importante" capacitar a las personas para que "puedan vivir con gozo la belleza y la hermosura de cada vocación".

Finalmente, ha opinado que las nuevas tecnologías son "retos" para la iglesia de "cómo transmitir el mensaje", pero también "oportunidades" de hacerlo llegar de "un modo nuevo".