El juez encarcela a cinco de los quince anarquistas detenidos

Velasco imputa a los detenidos un delito de integración en organización terrorista de tipo insurreccionista-anarquista, pues a las características del delito de organización criminal del artículo 570 bis del Código Penal se añade que el fin de los arrestados era subvertir el orden público y alterar gravemente la paz pública

A los detenidos, como miembros de los Grupos Anarquista Coordinados (GAC) se les relaciona con actos de coordinación y promoción de sabotajes y daños en 114 cajeros. El magistrado, según estas mismas fuentes, investiga también su relación con los artefactos de El Pilar y La Almudena.

Entre los elementos incautados se encuentran manuales para confeccionar artefactos explosivos y tácticas de guerrilla; fotos de policías y comisarias como objetivo de sus ataques; reivindicaciones de actos con artefactos explosivos; documentos de organización y financiación y proselitismo de jóvenes para realizar actos terroristas; manuales de autodefensa y de técnicas para evitar el seguimiento y la detención policial; así como dispositivos técnicos de acceso cifrado a wifi para hacer anónima su navegación por internet que estaban ocultos en bolsas de aseo.

Entre los detenidos están los lideres de los GAC en Madrid, Barcelona y Palencia.

Uno de los detenidos, Enrique Balaguer, fue ya arrestado en la operación Pandora y cuando fue puesto en libertad en febrero, ha continuado con la actividad delictiva, según la Audiencia Nacional.