Todos los partidos de Bilbao acuerdan reforzar la prevención de la violencia machista

La propuesta ha partido de Elkarrekin Podemos, que ha alcanzado un acuerdo con el PNV y el PSE. La edil morada Carmen Muñoz ha expuesto que según datos recogidos por Emakunde, en Euskadi, un total de 5.430 mujeres sufrieron violencia machista en el 2021, incluyendo violencia ejercida por pareja o expareja, violencia intrafamiliar y delitos contra la libertad sexual; 154 casos más que el año anterior. Asimismo, «según datos del Área de Seguridad Ciudadana, los delitos contra la libertad sexual incluyendo agresión, abuso y acoso sexual crecieron un 69% sobre el año anterior».

A juicio de la edil, «estas cifras evidencian el largo camino que queda para erradicar este problema estructural que afecta a las mujeres por el simple hecho de serlo, poniendo en peligro su vida y su dignidad. En este sentido, no podemos olvidar a las dos mujeres asesinadas en Sestao y en Vitoria el año pasado», ha explicado. Por todo ello, «creemos necesario seguir insistiendo en poner en marcha nuevas herramientas que puedan prevenir las violencias machistas». Muñoz se ha referido a unas señales como un gesto con la mano o la pregunta ¿Está Ángela? «que pueden salvar la vida de las mujeres de forma discreta y sin que el agresor se dé cuenta».

La edil popular Raquel González ha insistido en que estas señales también deberían ser difundidas para que toda la ciudadanía las conozca y que puedan ser interpretadas por la persona a la que las mujeres se dirigen. Desde EH Bildu, Alba Fatuarte ha explicado que aunque siempre van a estar a favor de habilitar más recursos que eviten la violencia de género, siempre se pone el foco «en cómo permitir a las mujeres evitar o salvarse de este tipo de agresiones» en vez de en campañas que interpelen a los agresores, y ha apostado por impulsar también iniciativas como talleres de nuevas masculinidades o de ligoteo sano.

La edil de Igualdad, la jeltzale Nekane Alonso, ha recordado que en 2008 se empezó a colocar el punto lila en 63 municipios vascos de la red Berdinsarea, una iniciativa que se ha extendido a centros públicos, por ejemplo ambulatorios. También ha destacado que el Ayuntamiento ha lanzado una app contra la violencia machista, por la que solo pulsando un botón se alerta a la Policía Municipal del peligro. Aun así, ha recalcado que no ven la necesidad de poner en marcha una campaña específica por el 8 de marzo, aunque sí de seguir reforzando los contenidos y las campañas. El Ayuntamiento, ha explicado, también defiende el empoderamiento personal y colectivo de las mujeres, para que pasen de ser víctimas a ser supervivientes, y la revisión crítica de los modelos masculinos dominantes.

Aun así, a primera hora de la mañana, no ha existido consenso en otro punto referido también al área de Igualdad. El Pleno ha aprobado la modificación del reglamento de organización y funcionamiento del consejo de las mujeres de Bilbao, aprobado por sesión plenaria el 28 de abril de 2005. El fin, según el equipo de Gobierno, era atender las demandas de las mujeres presentes en las asociaciones de mujeres y movimiento feminista para promover su participación en el desarrollo de políticas de igualdad municipales y «disponer de un reglamento que fuera más operativo, con menos estructura, que se ajustara al número de entidades que suelen acudir a las reuniones y simplificar los requisitos para ser integrantes del consejo».

EH Bildu presentó 9 enmiendas, aunque solo una ha sido aceptada. Jone Goirizelaia ha explicado que el reglamento no consigue articular una participación activa de las asociaciones de mujeres y del movimiento feminista. «Apenas participan unas pocas asociaciones y el movimiento feminista hace años que abandonó este espacio». A su juicio, el «nuevo reglamento va a ser peor que el anterior» y el objetivo de sus alegaciones era «mejorarlo». El resto de grupos han decidido aprobar la modificación del reglamento tal y como se planteaba, porque ha contado con consenso y con la participación del consejo. La edil Nekane Alonso ha pedido incluso a EH Bildu que retirara sus alegaciones, sin éxito.