El número de conductores 'cazados' por los radares de Bilbao se reduce a la mitad

La bajada en el número de sanciones no está relacionada con el número de vehículos controlados. Al contrario, según ha explicado Arregi, en 2023 se fiscalizó la velocidad del doble de turismos y camiones que en el año anterior. Un total de 4,2 millones de automóviles fueron escudriñados por el cinemómetro. Y ¿por qué se han reducido entonces las denuncias? Las dos posibles explicaciones que aduce la Policía Municipal tienen que ver con el tipo de carreteras que se han controlado y con una mayor conciencia social en la obligatoriedad de circular a un máximo de 30 kilómetros por hora en toda la ciudad.

Respecto al primer punto, los responsables de la guardia urbana han asegurado que se está «priorizando» poner los radares en los viales «donde puede haber un mayor peligro para los peatones o porque haya cruces peligrosos» frente a otro tipo de carreteras. Hay que tener en cuenta que el número indeterminado de radares que dispone la Policía (su número no se hace público), tanto fijos como móviles, se van moviendo. No todas las cajas disponen del aparato de medición.

Y en cuanto el Bilbao a 30, la concejala ha afirmado que «va calando y se ve que están mejorando los datos». Arregi hizo un balance positivo de la memoria de 2023. «Tenemos buenas sensaciones y mejores datos». El número de siniestros cayó un 2,76%. Hubo 1.547 accidentes, el menor número desde 2014 (exceptuando los años de pandemia). En el 68% de los percances no hubo desgracias personales. El número total de heridos fue de 596 (562 leves y 34 graves).

Destaca especialmente el descenso en el número de peatones atropellados. Algo en lo que el Ayuntamiento de Bilbao está haciendo un especial esfuerzo. En 2022 fallecieron cuatro viandantes arrollados por coches. Este pasado año no ha muerto ninguno. Hubo 109 atropellos frente a los 132 de 2022.

Respecto a la mortalidad, solo una persona perdió la vida en un accidente de tráfico el año pasado. La concejala ha matizado que el juzgado está investigando las causas del óbito, que podrían no estar relacionadas con el siniestro.

En 2023 se denunció también a 108 patinetes eléctricos. Una cantidad también muy inferior a la de 2022, cuando fueron 220 sanciones. Y todo ello teniendo en cuenta que el parque de estos vehículos «ha crecido de manera importante», apuntaron desde la guardia urbana. Cada vez hay más repartidores de comida rápida, por ejemplo, que suben a estos dispositivos de movilidad personal.

La edil ha concluido su intervención pidiendo prudencia a los conductores y todos los colectivos implicados en la movilidad. «Seguimos trabajando para rebajar el número de accidentes y que sean menos lesivos», ha dicho. También para «reducir a cero las víctimas mortales». Todo esto, ha insistido, tiene que ser «una labor constante y no solo un objetivo a alcanzar».