Los nuevos gurús de Rementeria

Esta es la evidente recompensa al trabajo que ambos desarrollaron durante el primer mandato de Rementeria en el ente foral. Una etapa en la que Bizkaia ha multiplicado su proyección y, a ojos del mundo, ha dejado de ser exclusivamente Bilbao, si es que antes se relacionaba lo uno con lo otro. El 'boom' de San Juan de Gaztelugatxe tras su aparición en 'Juego de tronos' da fe de ello. Alea, como director de Promoción Exterior y Turismo, se ha encargado de atraer actividad al sector, especialmente con la organización de grandes eventos como los premios de MTV y las finales europeas de rugby. En paralelo, Atxutegi, su homólogo en Acción Exterior, ha tirado del carro para que las empresas vizcaínas se abran al mercado internacional.

Llegaron a la Diputación en 2015 de la mano de Rementeria y, pese a su juventud, contaban ya con unos currículums de vértigo. Alea (Muskiz, 1972) fue el primero de su promoción de Economía y Relaciones Internacionales en la Universidad de Boston, realizó un máster en el prestigioso MIT y otro en Oxford, donde es candidato al doctorado. Casado con una mujer de origen calabrés, habla italiano –además de español, euskera e inglés– y ha desarrollado su trayectoria profesional en el ámbito privado. En concreto, ha sido consultor estratégico en fusiones y adquisiciones en el sector industrial; sobre todo, en telecomunicaciones y energía. Al frente del área turística, su modelo de desarrollo ha estado en los países escandinavos. «Han hecho de su identidad un plus», analizaba en una entrevista concedida a este periódico.

Por su parte, Atxutegi (Bilbao, 1974) es licenciado en Derecho y diplomado en Economía por Deusto, y completó su formación en la Escuela de Práctica Jurídica y un máster de Administración de Empresas en Chile, país con el que ha establecido una estrecha vinculación. Allí, de hecho, fue el máximo responsable de la delegación del Gobierno vasco y posteriormente pasó a coordinar todas las de América Latina. Participante habitual en medias maratones, domina euskera e inglés, y en su cargo en la Diputación ha hecho hincapié en las relaciones entre las empresas y las universidades.

La retención del talento joven es precisamente uno de los dos grandes retos que Rementeria les ha encomendado a ambos. El objetivo es que los estudiantes vizcaínos –ya sean universitarios o de FP– satisfagan la demanda de perfiles técnicos en las empresas del territorio y no se vean abocados a hacer las maletas como ocurrió durante la crisis económica. El otro desafío también está en el mercado laboral. Con una tasa de paro ya por debajo de los dos dígitos, según el INE, ahora toca estabilizar el trabajo sin perder de vista que el desempleo sigue siendo la principal preocupación de la ciudadanía.