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A. ANDUEZA
GALDAKAO.
Martes, 9 de enero 2018, 01:00
La Semana de la Memoria de Galdakao se celebra en mayo organizada por la asociación Galdakao Gogora, que ya está trabajando en la edición de este año. En esta ocasión, serán las mujeres represaliadas y condenadas por el franquismo las protagonistas, como lo fueron los ... hombres fusilados en la anterior edición de estos actos de memoria histórica. «Más olvidadas e ignoradas que los hombres, serán el eje central de la exposición que estamos preparando», explicó un portavoz de la agrupación. Según estos «recuperadores» de la historia, no fue tarea sencilla recabar la información necesaria sobre sus compañeros hombres presos y fusilados, porque estaba diseminada, «y a menudo nos encontramos con numerosas lagunas. Con la colaboración de familiares y conocidos pudimos realizar una exposición y un sencillo acto de memoria y reconocimiento a estos vecinos tantos años olvidados que fueron fusilados en 1937 y 1938». Si ese trabajo fue difícil, ahora se antoja más complicado recopilar información sobre ellas, las otras víctimas, porque fueron mucho más desconocidas y están más olvidadas. Por ello, los miembros de esta asociación que trabaja desinteresadamente por recuperar la memoria histórica del pueblo han vuelto a pedir que se alguien tuviera algún dato sobre alguna de estas mujeres se ponga en contacto con ellos a través del mail galdakaogogora@gmail.com. «Solicitamos a familiares y conocidos de estas mujeres toda la información, fotografías y documentos que puedan aportarnos para hacerles un merecido acto de reconocimiento y memoria», explicaron.
De momento, la asociación ha logrado algún dato de galdakaotarras presas en diferentes cárceles durante la dictadura: Sofía Aranburu Larizgoitia, Faustina Arostegi Goikoetxea, Felisa Bilbao Iturriaga, María Bustinza Ituarte, Concepción Ealo Ereño, Teresa Jáuregui Kareaga, Virginia Jáuregui Emaldi, Ramona Jugo Aspuru, Juana, Sagasti Ibáñez (Valle) y Rosario Urizar Etxebarria fueron condenadas por tribunales fascistas que las enviaron a las prisiones de Saturraran, Larrinaga o el llamado «chalet» de Orue de Bilbao.
Injusticias
Por ejemplo, el balneario de Saturraran fue la cárcel más importante de mujeres de todo el frente norte. Galdakao Gogora puntualiza que «varias vecinas pasaron años en dichas prisiones sufriendo todo tipo de penalidades e injusticias. Tras tantos años de miedo, represión y olvido, creemos que es nuestra obligación hacer todo lo posible para que estas galdakaotarras reciban el reconocimiento y homenaje de su pueblo», apuntó la agrupación .
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