«Seguiremos con las protestas para retrasar las obras de la Línea 5 del metro»

La ciudadanía de Usansolo sigue tocando puertas para tratar de modificar el actual proyecto de la Línea 5 a su paso por el municipio. Este martes, dos representantes de la plataforma vecinal Geltokia Erdigunean, Jon Atxutegi y Josu Grandibal, han acudido a la comisión de Movilidad Sostenible del Parlamento vasco para mostrar una vez más el rechazo del pueblo a la iniciativa. Han insistido en que la mejor opción para los usansolotarras era mantener una estación en el centro de la localidad, en lugar de las alternativas planteadas por el departamento, que pasarían por acercar a los usuarios desde el hospital a través de una lanzadera o un cañón subterráneo de 500 metros. Y han anunciado más movilizaciones para manifestar su postura en contra de la propuesta.

Los vecinos han defendido que dejar una parada en el centro sería más beneficioso para los usansolotarras porque los desplazamientos serían más cortos y daría servicio a un mayor número de usuarios que la lanzadera. Y se han apoyado en el estudio de viabilidad elaborado por Sener a petición de Euskal Trebide Sarea (ETS) el pasado año para afirmar que la opción que plantean «es la mejor alternativa». Atxutegi ha señalado que «la propuesta que maneja ETS, la de la lanzadera conectaría en una franja de cinco minutos a 832 vecinos y la estación en el centro a 1.750, más del doble». En cuanto al tiempo, el portavoz ha asegurado que «ahora llegamos a Bilbao en 17 minutos con frecuencias de 15, pero estamos hablando que en el futuro habrá que invertir 12 o 13 minutos más».

La opción preferida por los usansolotarras es también la más cara. Mientras que el autobús costaría 16,8 millones, de los que se haría cargo el Gobierno vasco, el cañón subterráneo en torno a 19,4 millones y la estación elevaría el presupuesto a 70 millones (con su mantenimiento de cincuenta años), según el Ejecutivo autonómico, cifra que los vecinos rebajan a 55 millones. En este sentido, Atxutegi ha remarcado que «la razón económica no debe ser la única causa para decidir si un proyecto es o no viable».

El portavoz ha insistido en que mantener la parada en el núcleo urbano «es viable» y ha expresado su deseo de que «las políticas públicas apuesten por mejorar los servicios, no por empeorarlos». Todos los grupos en la oposición en el Parlamento vasco -Grupo mixto-Sumar, Partido Popular y EH Bildu- han mostrado su apoyo a la plataforma y han solicitado un «esfuerzo» para atender sus reclamaciones.

«Os pedimos que toquéis las teclas necesarias para que de aquí a mayo el proyecto se modifique», han reivindicado los representantes de Geltokia Erdigunean. En el PSE, partido que dirige la cartera de Movilidad Sostenible, han negado que la cuestión monetaria sea la única y han afirmado que «en los estudios se ha tenido en cuenta la sostenibilidad social y medioambiental». Su socio de gobierno, el PNV, ha invitado a los vecinos a seguir usando la vía del diálogo para llegar a acuerdos.

Durante el turno de réplica, Atxutegi ha elevado el tono al subrayar que «Usansolo no quiere metro ni ser el núcleo de expansión de Bilbao». Si bien se ha mostrado comprensivo con que la L-5 acerque al resto de vizcaínos al centro sanitario, ha apostillado que «Usansolo no es exclusivamente el hospital».

Asimismo, se ha mostrado abierto a seguir llegando a consensos pero ha avisado: «Seguiremos intentando retrasar las obras lo máximo posible porque eso implica que Usansolo, en tanto duren las tareas, va a seguir teniendo el servicio que merece. Torpedear unos trabajos que beneficien al conjunto de Bizkaia no es lo que queremos hacer, pero es la única forma de que ETS se reúna con nosotros». Por lo pronto, este sábado, la plataforma ha convocado una manifestación en la capital vizcaína. La marcha saldrá a las doce de la mañana de El Arenal y terminará en el Palacio de la Diputación.

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