El pleno de Galdakao tumba la liberación del concejal de Urbanismo

Se sabía que los socios de gobierno Usansolo Herria y Podemos iban a apoyar a EH Bildu, pero había dudas sobre el criterio del grupo independiente Auzoak, pues cabía la posibilidad de una posible división de opiniones dentro del Ejecutivo local. De hecho, su portavoz, Mari Paz Losada, reconoció en la sesión que «no nos parece bien la modificación de sueldos que se quiere llevar a cabo y, por ello, votaremos de forma diferenciada la decisión, pero no la aprobamos en su mayoría». Y así fue. Sus tres ediles no consensuaron una postura única: mientras Francisco Ibarretxe dio su apoyo a la propuesta, Losada y Olaia Parra dijeron 'no', lo que acabó por inclinar la balanza.

La gran polémica en el pleno llegó por el salario que Egiraun iba a percibir, 58.171 euros, tal y como confirmó el primer edil, Iñigo Hernando. Esta cantidad suponía ganar unos 5.000 euros más que el propio alcalde. La intención era que el concejal dejara «su actual trabajo y, de esta forma, tuviera la misma retribución que tiene ahora en su puesto». De hecho, ya en el mes de julio se planteó su liberación, pero se retiró y se pospuso para septiembre.

El equipo de gobierno también tenía previsto aprobar la creación de una horquilla en la que se hubiera aumentado el nivel máximo de retribución del primer edil y de los concejales del gobierno hasta los 59.171 euros. Ante las acusaciones de la oposición, que dejaron entrever una intención de subida de sueldo generalizada, Hernando zanjó el tema alegando que no habría «más modificaciones de salario».

En este sentido, el Ayuntamiento ha ahorrado cerca de 120.000 euros en sueldos durante los dos primeros años en el mandato. Esta cifra no se verá reducida por no haberse aprobado el nuevo cargo liberado. Eso sí, de forma global el Ejecutivo local también va a seguir reduciendo su gasto en casi 90.000 euros anuales gracias a los recortes en dietas y en designaciones económicas a los partidos, según los datos facilitados por el Consistorio.

La liberación de Egiraun se hubiera sumado a las ya aprobadas en julio de 2019, al comienzo de la legislatura. A día de hoy, son cuatro los ediles con dedicación exclusiva en labores municipales -dos de EH Bildu y dos de Auzoak- y cuatro asesores, uno más que durante la anterior legislatura.

PNV, PSE y el concejal no adscrito Miguel Ángel Martín fueron críticos y mantuvieron su rechazo a la propuesta. Votaron en contra y cargaron fuertemente contra el punto. El partido jeltzale indicó que «Bildu, Usansolo Herria y Podemos siempre han criticado las liberaciones en el Ayuntamiento, pero en cuanto han llegado al gobierno actúan de forma contraria. En tan solo dos años han aumentado el número de liberaciones».

El portavoz del Partido Socialista, Txema Larrazabal, juzgó la elevada cantidad del sueldo que hubiera cobrado Egiraun. «EH Bildu hablaba de no sobrepasar el salario mínimo interprofesional, de trabajar por la ciudadanía altruistamente, pero parece que ahora no. Eso era para otros».