Orduña prioriza a los peatones en su casco histórico

Una de las grandes modificaciones que sufrirá el casco histórico será el cambio de dirección en varias de las calles que llevan hasta la plaza. Los vehículos circularán por Cantarranas, Barria y Burgos para salir, y no para acceder al centro, como se ha podido hacer hasta ahora. A su vez, el tráfico en Zaharra también cambiará de sentido y los automóviles que transiten por dicha calle podrán entrar a la Foru Plaza y desde ahí únicamente girar hacia Gran Vía.

La estampa habitual de la zona centro de la villa, con más vehículos que viandantes, «se tiene que dejar atrás», aseguran desde el Consistorio. Asimismo, tal y como adelanta Sanz, estos trabajos se completarán con la colocación de cámaras de vigilancia a la entrada del barrio de San Miguel y en el paseo de La Antigua. «Lo que se pretende es que las personas que entren a la plaza en coche no puedan estar más de quince minutos. Podrán acceder quienes tengan las viviendas en el casco, aquellos que tengan que hacer carga y descarga o tengan aparcamiento», añade el concejal. Y adelanta que la idea es que sea el principio del camino hacia la peatonalización. «Es algo que no podemos hacer de golpe, la ciudadanía se tiene que dar cuenta de que esto trae una mejora en la calidad de vida de todo el pueblo», comenta.

El único tramo que, por el momento, será únicamente para peatones es el que comprende desde la iglesia de la Sagrada Familia hasta el Ayuntamiento. «Es muy diferente pasar por la plaza, con miedo de que venga algún coche, a pasear tranquilamente, y tenemos que avanzar hacia ello», añade. «Los vecinos y los comercios son el alma de esta zona de Orduña, y es lo que tenemos que proteger».

Son varios los hosteleros y comerciantes que celebran estos avances. «Ha habido veces en las que no he podido abrir la tienda porque tenía un coche delante y he ido preguntando bar por bar a ver de quién era», señala María, al frente de la tienda de ropa infantil Mabuti desde hace 23 años. «Cuanto menos se circule, mejor. Hay que cambiar el chip de querer aparcar delante de las tiendas o los bares», añade. En el bar 'X', sus trabajadores han sufrido muy de cerca los trastornos que provoca el estacionamiento indebido de los coches. «Un poco más y nos lo dejan en la terraza», comentan. «Ahora lo que toca es acatar las nuevas condiciones y cumplirlas», dijeron.

«Ya solo que se arregle el suelo nos parece estupendo, porque se han producido muchas caídas, llevan años parcheando cada vez que se levantaba un adoquín y ya era hora de que se adecentase enserio», opinan Mari Carmen y Arturo, residentes orduñeses. En esta línea, el Ayuntamiento señala que la plaza «se hizo para ser peatonal y dado que no ha sido así, anualmente ha habido unas pérdidas de dinero en arreglos tremendas».