Las negociaciones entre la plantilla de Araluce y Batz siguen en punto muerto

Desde Batz, la sociedad que compró la factoría en 2016, sostienen que llevan más de un año buscando a un nuevo socio. Algo que no ha sido posible hasta la fecha. «No podíamos hacer frente a las dos plantas y por ello, planteamos la disolución de Araluce», confiesan. «Hemos vuelto a proponerles este pasado lunes que nos devuelvan los troqueles que aún continúan en el interior de la empresa ya que están poniendo en peligro a la sociedad. A cambio, ampliaríamos el plazo hasta finales de marzo», revela un portavoz oficial. Esta última oferta tampoco ha convencido a la plantilla. «Quieren darnos carga de trabajo y que a su vez el comité de empresa redacte y firme las cartas de despedido de los 141 trabajadores. Eso no va a pasar», asegura Salazar.

El tiempo apremia y las posturas no pueden estar más alejadas. La próxima reunión se celebrará mañana a partir de las 11:00 horas con el Consejo de Relaciones Laborales (CRL) como testigo.