«Es algo que llevábamos esperando desde hace mucho tiempo»

Tras esa feliz noticia, ayer se respiraba un ambiente de optimismo y alegría en cada esquina de la localidad a pesar de la intensa lluvia acaecida a lo largo de la mañana. «Al final se ha conseguido y ha sido un proceso muy largo. Son muchos años manifestándonos por Galdakao pero ya ha llegado. El Usansolo de mañana lo veo mejor porque por lo menos tendremos más dinero y servicios. Hasta ahora, al ser un barrio de Galdakao estábamos más abandonados. Todo va a ir a mejor» explica Txema Camiruaga, que regenta un bar de esta zona de Nervión Ibaizabal que ha visto como en las dos últimas décadas ha llegado mucha gente joven a vivir.

«Después de esta noticia, reina una gran satisfacción y más después de todo el tiempo que se lleva. Me gustaría que fuéramos pueblo el día de mañana pero como a veces nos dan un sí, luego un no y viceversa, entonces parece que no llega nunca. Esto es como el TAV y el metro al hospital pero algún día llegará y al que le toque disfrutarlo que lo haga», añade uno de los vecinos que confiesa que se deberían mejorar la infraestructuras y una mayor cantidad de comercios para su crecimiento ya que «es algo que se va a perder y en pueblos como éste, las tiendas se acaban cerrando».

Otro grupo de ciudadanos tomaban champán para festejar las buenas noticias de las últimas semanas. Entre ellos, algunos, ataviados con las camisetas para la ocasión, celebraban con esta bebida la comida de la quinta del 68. «Estábamos esperando desde hacía mucho tiempo, años. Queremos ver un Usansolo mucho mejor y próspero», subrayan Enrique Abad e Inma González.

A la espera de que el Tribunal Superior del País Vasco se pronuncie sobre el caso, Usansolo vive un periodo de absoluta interinidad. Una gestora lidera el Ayuntamiento, aunque no puede tomar decisiones de calado porque el recurso impide que el Ministerio de Política Territorial inscriba la localidad en su Registro de Municipios. Es un trámite imprescindible para que un consistorio eche a andar. Sin eso no hay padrón ni, entre otros, número de identificación fiscal. La situación impidió, por ejemplo, que el pasado mayo se celebraran elecciones locales.

«Me enteré en el trabajo. A pesar de que es una noticia que te pilla por sorpresa, se sabía ya porque ya era oficial. Esto va a plazos, como una especie de telenovela. No obstante, una cosa es el corazón y otra es el tema económico y la viabilidad que tenga el proceso y eso se va a ver día a día trabajando con ello» añade José Eduardo Fernández. Su compañero, Ambrosio Giraldo, nacido en Galdakao, reiteraba que luego saldrán los partidos políticos del pueblo y cada uno con su alternativa. «Se votará al más necesario, al que haga falta y se cambiará de voto siempre que sea necesario».

Otro de ellos apuntaba que ven el corto plazo con «mucha esperanza». «Estamos muy ilusionados pero ya llevamos tantas piedras que todavía no tenemos el sí definitivo. Ahora nos falta la confirmación segura y que se inscriba Usansolo en el Registro» subraya Enrique Barrenetxea.

El visto bueno a la segregación de Usansolo lo dieron las Juntas Generales, con los votos a favor de PNV, EH Bildu y Podemos, en base a la norma foral de demarcaciones territoriales, que fija en 2.500 el número de habitantes necesarios para autorizar la constitución de nuevos municipios en Bizkaia. La Diputación, parte activa en este caso, defiende que es esta legislación la que prevalece. El Gobierno central opina lo contrario.

El presidente de la comisión gestora de Usansolo, Juan Agustín Aizpuru, iba más allá y reconocía que el proceso «ha sido largo pero satisfactorio». «Se nos antojaba que el recorrido iba a ser muy largo (entre 5 y 7 años), pero por la vía política pedimos la modificación de la ley que nos obstaculizaba en cuanto al número de habitantes», valoraba. Él mismo se enteró de esta gran noticia a las diez de la mañana del pasado viernes cuando le comentaron que el PNV va camino de Madrid y que dentro de ese acuerdo va el tema de Usansolo. «Me puse nervioso y por la tarde ya conocimos el acuerdo», prosigue.

Su compañero de Usansolo Herria, el concejal Iñaki Urgoiti que le gustaría ver el día de mañana un pueblo como es ahora. «Es muy participativo, social, manejable. Nos conocemos todos porque la mayoría hemos nacido aquí y hemos crecido. En ese aspecto, no me gustaría que cambiase mucho más. Nos hemos tenido que guisar nuestras habas por nuestra cuenta y funciona todo muy bien. Espero que siga siendo así», concluye.

Tanto Aizpuru como Urgoiti recalcaban que Usansolo tiene «necesidades de pueblo» y por eso necesita tener su propio ayuntamiento. «Siempre se ha visto relegado en cuanto a infraestructuras y servicios. Pero a partir de ahora, trabajaremos con Galdakao, nosotros no queremos romper nada y tiene que ser una transición natural, compartiendo servicios durante muchos años como es el caso del cementerio».

Según lo acordado por PNV y PSOE, en un plazo máximo de seis meses se debe aprobar en el Congreso la reforma de la Ley de Bases de Régimen Local. El objetivo es rebajar el requisito poblacional del Gobierno central a los nuevos municipios a 4.000 habitantes. Usansolo, que no tardará en alcanzar los 5.000 visto su sostenido crecimiento demográfico de los últimos años, se convertirá así automáticamente en municipio de pleno derecho y, en principio, debería decaer el recurso presentado por la Abogacía del Estado.