Un hostelero de Galdakao achica agua tras las lluvias del domingo E.C.

Hosteleros y vecinos de Galdakao miran con miedo al cielo tras las lluvias del domingo

Las precipitaciones intensas inundaron calles y bajos de locales, aunque no causaron grandes averías

Alba Peláez

Galdakao

Lunes, 19 de junio 2023, 19:09

El Ibaizabal bajaba este lunes a su paso por Galdakao con un tono marrón causado por las precipitaciones que durante la tarde del domingo causaron grades balsas de agua. Las fuertes lluvias impidieron la circulación en ciertas zonas del municipio y de localidades cercanas como ... Basauri o Etxebarri. Los hosteleros confesaban que además de tratarse de un hecho puntual, «no recuerdo situaciones así más allá de las riadas».

Publicidad

Juan Bautista Uriate, principal arteria de Galdakao quedó ayer completamente inundada. Los vecinos no tardaron en inmortalizar el momento con sus móviles en imágenes en las que se podía apreciar cómo los coches estaban completamente atrapados en balsas de agua. Eso sí, aunque las tormentas se sintieron en todo el pueblo, en cuestión de media hora ya habían escampado, aunque a más de uno se le metió el miedo en el cuerpo. «Ojalá no nos llueva más así», deseaba este lunes la camarera del bar Arrien Barri. El local fue uno de los que se llevó la peor parte.

Más de un hostelero tuvo que ponerse a achicar agua al ver que penetraba por debajo de la puerta, es el caso del Galdakanés y del Atseden, ubicados a escasos metros del Arrien Barri. En esta misma zona se encuentra el bar Arantza donde Concepción Molina cuenta que tuvieron más suerte que el resto. «Nosotros tenemos un pequeño muro delante de la terraza que construyeron y que evitó que entrara al agua al bar. Nos libramos, pero yo que vivo cerca pude ver que estaba todo inundado. Eso no pasaba desde las crecidas del río».

Una pareja de vecinos que frecuentan los bares afectados cuentan que «tuvimos que quedarnos encerrados en uno de los locales porque no podíamos salir. Estaba todo lleno de agua», recuerdan. «Fue cuestión de media hora, pero las arquetas no tenían tiempo de tragar toda la lluvia que caía», apunta la mujer. El paso de los pocos coches que se habían visto atrapados en este área empeoraba la situación para los locales: «Cuando pasaba uno, formaba una ola que volvía al interior del bar y no daban a vasto para sacar el agua».

Filtraciones en garajes y terrazas

En la vecina Etxebarri y Basauri la situación no causó ninguna avería grave. El presidente de la asociación de comerciantes de la cabecera de comarca, José Feijoo, explica que «no tenemos constancia de siniestros graves». Aún así, asegura que «salvo las riadas, no recuerdo en tan poco tiempo ver tantas calles con balsas».

Publicidad

En Etxebarri, las circunstancias obligaron a «cortar carreteras por el nivel de inundación», explica Iker López, alcalde del municipio. El agua «sí ha entrado en la escuela y en la ludoteca municipal, y hemos visto imágenes de terrazas de particulares y garajes en los que se había filtrado el agua». Afortunadamente, tampoco les constan averías graves por este motivo.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad