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CRISTINA RAPOSO
GALDAKO.
Viernes, 7 de febrero 2020
Ya es una realidad: el metro llegará a Galdakao y su construcción arrancará en 2021. Así lo prometía el pasado mes de enero el propio diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria, y ayer, en el pleno de control del Parlamento vasco, lo ratificaba Arantxa Tapia, ... la consejera del Departamento de Desarrollo Económico e Infraestructuras. Incluso existe un presupuesto, que asciende a casi 500 millones de euros. «El montante económico del proyecto, con los datos que estamos manejando hoy en día para ambas fases, es muy importante, de entre 400 y 500 millones de euros. Por tanto, realizarlo en dos fases podría ser la solución más adecuada», confesaba la responsable del área. De este modo, la consejera rechazaba la propuesta de ejecutar el proyecto en una única fase, tal y como había planteado minutos antes el portavoz de Elkarrekin Podemos, José Ramón Becerra.
No fue el único dato que descubrió Tapia en la sesión parlamentaria. El proyecto alternativo que presentó el Gobierno vasco en 2018, que descartaba la línea 5 del metro -el diseño que nació en 2010 y nunca se materializó-, abogaba por una primera fase que consistía en conectar la zona de Durangaldea con el Hospital Galdakao-Usansolo. Y todo a través de un ramal paralelo a la actual línea de Euskotren (L3).
Esta nueva conexión ferroviaria también llegaría hasta el centro de la población, con una línea que transcurriría bajo tierra desde el propio centro sanitario. No obstante, este primer plan ya ha sido descartado. «Comenzar por esta fase no es lo más adecuado porque tendría repercusiones negativas en los propios viajeros, ya que tendrían que retroceder hasta Bedia para coger el carril principal que conecta con Bilbao. Además de retrasar el servicio, puede poner en duda las frecuencias que pretendemos dar», confesó la consejera.
Así las cosas, lo que ahora se contempla es iniciar el proyecto del suburbano por la segunda fase: construir la intermodal de Sarratu en Basauri y conectarla con el centro de Galdakao. Una medida que también fue aplaudida por el portavoz de la plataforma morada. «Tiene lógica comenzar por esta fase, ya que de este modo se beneficiarán cerca de 32.000 vecinos», valoró Becerra.
A través de la nueva intermodal basauritarra, este nuevo tramo ferroviario se fusionaría con las Líneas 1, 2 y 3 de Metro Bilbao. Esta conexión directa con la capital vizcaína también solventaría uno de los mayores quebraderos de cabeza del Ejecutivo galdakaotarra: la lanzadera. El servicio, que actualmente para en Bolueta, ha cambiado siete veces de emplazamiento y aún así, no termina de convencer a sus residentes que califican la nueva parada de «muy peligrosa». De hecho, y para resolver la problemática, el pasado mes de octubre, el alcalde de la localidad, Iñigo Hernando, y la vicealcaldesa y concejala de Movilidad y Transporte, Mari Paz Losada, se reunieron con el director foral de Transporte y Movilidad, Vidal Martínez, para buscar «medidas que mejoren la calidad de vida de sus vecinos» en cuanto al transporte público se refiere.
Las condiciones en las que desembarcará el futuro metro en Galdakao protagonizaron las sesión de control del Parlamento vasco. José Ramón Becerra, miembro de Elkarrekin Podemos, preguntó a la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia, qué planes se reservaba el Gobierno de Urkullu para los barrios altos del municipio: Aperribai y Bengoetxe. «En su propuesta de 2019 el proyecto solo recogía dos paradas, la de Galdakao y la del hospital. Por tanto, me pregunto si los barrios altos, que en su momento sí que tenían servicio con la línea 5 del metro, contarán con una parada específica», interpeló el portavoz de la plataforma morada.
La consejera Arantxa Tapia, y sin desvelar esa parte del proyecto, aseguró que en el nuevo informe, aún en fase de elaboración, se estaba considerando «establecer una parada en los citados enclaves». No es la primera vez que se debate esta cuestión del suburbano. En las Juntas Generales del pasado mes de enero los apoderados de EH Bildu, Bea Ilardia y Raúl Méndez, también pidieron explicaciones al diputado de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, Imanol Pradales, sobre el futuro del metro después de que se publicara una información en la que la entidad foral avanzaba que el proyecto también llegaría a los barrios altos.
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