Una cacerolada denuncia en Igorre el «deterioro del comedor» escolar

Los representantes de las familias denuncian «la difícil situación que atraviesa el servicio desde hace casi un mes». Entonces terminó el contrato de una cocinera contratada de forma eventual durante seis meses y que ayudaba a los otros cuatro trabajadores habituales. Desde el Departamento de Educación aclaran que se realizó dicha contratación porque, ya una vez avanzado el curso, se superaba el ratio de menús por cocinero que establecen los pliegos de la licitación y cuando sucede un exceso de producción de estas características, algo que también ocurre en otros centros escolares, se recurre a personal temporal.

Sin embargo, el puesto de trabajo no ha podido seguir ofreciéndose por la «negativa de los sindicatos mayoritarios a prorrogarlo en la mesa negociadora», según comentan desde el departamento de Jokin Bildaratz. En esta línea, inciden en que el «pasado 21 de abril» comunicaron al centro de la comarca de Arratia la situación y ofrecieron la posibilidad de cubrir los menús que se quedaban sin poder elaborarse, en torno a 15, con un servicio de catering, algo a lo que los padres se negaron.

«Es inadmisible que se ofrezca a unos niños comida elaborada en el propio centro, porque contamos con un servicio al que llegan las materias primas y luego se cocinan, y a otros pequeños se les ponga en el plato los alimentos que se han hecho antes. ¿A quién le dan una cosa y a quién otra?», se preguntan los progenitores, que defienden que el centro cuente con una «cocina propia». Censuran además que «no se haya tomado una decisión mejor porque ya se sabe que está sucediendo este problema y el año que viene volverá a repetirse». El viernes pasado más de 200 personas, familias pero también docentes y trabajadores del centro, comieron de 'tupper' en el exterior del colegio para protestar por la situación y como apoyo al «esfuerzo que están llevando a cabo los cocineros». «Desde el AMPA consideramos que la situación es totalmente discriminatoria y que para nada responde al estándar de calidad que debe tener todo servicio público por lo que seguiremos movilizándonos», apuntan. En la comarca están sufriendo situaciones similares «Ugao, Usansolo y Lemoa». La semana que viene se reunirán los progenitores de estos centros.