El país de ‘Cebrero’ y ‘Cornieta’

«Nos encantan estos talleres. Son muy chulos», sentenciaban las participantes a las espera de dar rienda suelta a su imaginación con una verdadera historia de amor, convenientemente adaptada al reino animal. «Daremos vida a la historia de Cebrero y Cornieta. Basándonos en la mítica Romeo y Julieta, una cebra y un unicornio se enamoran, algo que sus padres no soportan, y finalmente todo acaba mal», resumieron. Encantadas con su original idea, no dejaban de observarse en la pantalla a través de la cual podían ver sus cuerpos integrados en un frondoso paisaje o en un escenario concreto, aunque ellas no dejaban de saltar y gesticular delante del fondo verde. «Se trata de que parezca que realmente están en un sitio sin estarlo. Generan una historia y se les pone una localización. Es una buena forma de introducirles en el mundo audiovisual», sentenciaron responsables de la empresa especializada.

Trabajo de posproducción

«Nosotros vamos a hacer de piratas, representaremos la búsqueda de un tesoro», sentenciaron otros niños a la espera de su turno. La imaginación, la improvisación y la implicación con una actividad son algunas de las bases de esta clase de talleres, que ya han recorrido otros centros culturales de Bizkaia. «Siempre que podemos venimos, aquí lo pasamos fenomenal», concretaron las jóvenes cebras y unicornios. «Nosotros no hemos pensado nada, lo mismo hacemos una escena de Street Fighter», sentenció un grupo de los más tímidos. Curioso que a esa edad conozcan uno de los juegos más míticos de los 90. A la búsqueda y captura de algún disfraz en un arcón ubicado en el centro de la sala, se les veía algo menos entusiasmados que a las niñas. Y, tras un par de horas, la actividad quedó recogida para que todos ellos se encarguen, junto a los monitores, de realizar un vídeo en el que podrán ver sus representaciones y conocer un poco más de cerca el mundo de la posproducción.