«Los móviles deberían venir por defecto con control parental para los menores»

- La delincuencia juvenil en internet aumenta. ¿Debemos estar preocupados?

- Y sobre aviso. Crecen los delitos informáticos, tanto los cometidos por mayores como por menores de edad. Las nuevas tecnologías, que ya no son tan nuevas, se utilizan como un instrumento más para la comisión del hecho delictivo. Yo pondría el acento en el mantenimiento de la victimización. El 'ciberbullying' ha existido siempre en el patio del colegio, pero ahora la expresión insultante u ofensiva se amplifica en las redes sociales y llega a una colectividad indiscriminada de niños.

- Las violaciones grupales cada vez son más comunes. ¿Están influidas por la pornografía?

- No me queda ninguna duda. Hay una relación directa entre el consumo de una pornografía presidida por la erotización de la violencia sexual y que la banaliza y las violaciones en grupo. Los delitos sexuales tienen un sesgo de género, coinciden con los delitos contra la mujer. Hay informes que así lo acreditan.

- ¿Cómo podemos proteger a nuestros hijos?

- Primero, con educación y concienciación en todos los ámbitos, desde el familiar hasta el sanitario. Los mejores defensores de los niños son ellos mismos, haciendo de cortafuegos. Los propios amigos son espectadores, que están también en el chat mientras se insulta y mantienen silencio o incluso corean. Tenemos que hacerles ver que esos actos no quedan impunes, sino que van a tener el mismo castigo que los que se cometen en la vida real. Vulnerar la intimidad de la amiga que en una relación de confianza te ha proporcionado una imagen en toples, y la pasas al grupo de Whatsapp, es delito desde octubre de 2022, y no hay conciencia de ello. El Código Penal es lo último, las barreras y la prevención tienen que venir antes.

- Los niños tienen cada vez antes su primer móvil.

- Debe quedar al criterio de los progenitores. Pero hay iniciativas interesantes en países europeos de grupos de padres que llegan a un acuerdo para retrasar esa edad. No hacemos nada si un padre decide que su hijo no tiene móvil hasta los 14 y está rodeado de niños que lo tienen desde los 10. La sociedad civil tiene que ir de la mano.

- Sólo en tres de cada diez casos ponen control parental. ¿Qué le parece?

- Debería venir por defecto, de serie en los móviles, y luego el papá que lo desactive si quiere. Y totalmente gratuito. El anteproyecto de Protección al Menor quiere concienciar de su instalación y prevé imponer al fabricante que en el móvil o la tablet se informe (como en la cajetilla de tabaco) sobre el tiempo recomendado de uso o el riesgo para su privacidad y seguridad.

- ¿Qué conductas delictivas están llegando a los juzgados?

- No tengo conocimiento de las conductas de menores, salvo cuando son sujeto pasivo. Lo que sí llevamos son las estafas, pornografía infantil o el 'child grooming' (ciberacoso sexual a menores), fundamentalmente.

- ¿Y cómo controlamos el comercio con nuestros datos?

- El foco hay que ponerlo en el negocio que las plataformas tienen con los menores de edad. Es la base de la demanda de EE UU contra la red social china Tik Tok. Están lucrándose a costa de una manipulación del consumo digital de los menores. A través del perfilado del usuario y de la publicidad hipersegmentada generan contenidos adictivos que le llegan al menor de inmediato. Sus capacidades volitivas no están desarrolladas. No se le puede pedir al niño una capacidad estoica de sustraerse a toda esa publicidad que le entra. A mi juicio, el anteproyecto ha perdido la oportunidad de exigir transparencia, quién está detrás de esa publicidad, quién se está lucrando del 'scroll' infinito de los menores.

- El alcance de la Inteligencia Artificial impone respeto.

- La manipulación de la imagen o la voz con sistemas de Inteligencia Artificial no está actualmente penada. Eso no quiere decir que quede impune. El caso Almendralejo, por ejemplo, se ha sancionado como delito contra la integridad moral y difusión de material pornográfico.

- ¿Qué herramientas ofrecen las últimas reformas a los jueces?

- La persecución de estos delitos, resulta difícil. Por su propia esencia son transfronterizos -víctima y autor pueden estar en una punta y otra del mundo-, a lo que ha de unirse la volatilidad de las pruebas. Además, las plataformas no colaboran siempre como deberían. La UE trabaja en un reglamento, Evidence, que entrará en vigor en febrero de 2026, para que la prueba electrónica obtenida en cualquier estado se pueda incorporar al proceso con todas las garantías. En la actualidad se permite a los jueces de cada país que puedan solicitar directamente información sin pasar por los mecanismos de cooperación internacional, lo cual acorta los plazos enormemente.

- ¿Qué otras medidas serían útiles?

- El anteproyecto prevé la pena accesoria de alejamiento de entornos digitales. Pero, ¿es eficaz o es poner puertas al campo? Las sentencias tienen que delimitar de forma concreta el espacio digital donde se va a imponer la pena. Si te prohíben acceder a Instagram, puedes hacerlo por otra red.