A Abdou, un joven de origen marroquí, le ha tocado el apellido Sánchez. Está un poco sorprendido porque él, al igual que muchas personas de otros países, tiene un solo apellido. ¿Cómo podía siquiera pensar que el Fisco vizcaíno le adjudicase otro más sin previo ... aviso, y menos en una documentación oficial como la de la campaña de la renta, donde uno espera pocas bromas? Pues le ha sucedido, y no es al único. Dos mujeres de origen rumano, madre e hija, están en la misma. De segundo apellido les han correspondido en este reparto aparentemente aleatorio dos distintos: a la más joven, Jaramillo; y a su progenitora, Chávez.
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Es habitual que, para evitar errores informáticos, Osakidetza y otras administraciones rellenen el espacio del segundo apellido con unas 'X', pero este caso es inédito. De cualquier modo, en varias asociaciones que trabajan con inmigrantes lo que preocupa, «más allá de los apellidos, es que están llegando muchos datos mal, algunos con la documentación provisional de hace muchos años cuando ya están nacionalizados».
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