La Misericordia veta los pliegos para arrendar y dar nuevos usos a la plaza de toros de Bilbao

El objetivo es rentabilizar su aforo de casi 15.000 espectadores con otras actividades. En un principio, los pliegos iban a estar preparados en septiembre. La plaza es propiedad de la Junta Administrativa, que conforman a partes iguales el Ayuntamiento de Bilbao y la Santa Casa de la Misericordia, y había que poner de acuerdo a mucha gente.

El día 17 de abril, la junta de Gobierno del Ayuntamiento iba a aprobar los pliegos. El concejal de Seguridad y administrador único del coso, Tomás Del Hierro, convocó una comparecencia para ese día para explicar a la oposición en qué iban a consistir: lo que la arrendataria tenía que pagar, cuánto tiempo iba a durar el contrato, qué tipo de actividades podía albergar la plaza y en qué periodos del año... Después, tenía previsto reunirse con las asociaciones taurinas para explicarles lo mismo.

Pero la junta de Gobierno dejó sobre la mesa el asunto y el edil de Seguridad desconvocó la comparecencia y la cita con los taurinos. ¿Por qué? El día antes, en una reunión de la Junta Administrativa de Vista Alegre, los representantes de la Santa Casa de la Misericordia pidieron tiempo para introducir «una serie de matices superficiales» en las cláusulas, según ha explicado el concejal de Seguridad este viernes por la mañana en la comparecencia a petición propia que ha solicitado tras haber anulado la del mes pasado.

Lo único que ha revelado del contenido de las cláusulas es que «el canon anual se va a parecer más al de 150.000 de Zaragoza». «Y hasta ahí puedo leer», ha zanjado. Las explicaciones han enfadado a los partidos de izquierdas, que se esperaban otra cosa. Detalles. Aitziber Ibaibarriaga, de EH Bildu, se ha mostrado «sorprendida» y tildado de «cachondeo» la convocatoria. «No sé usted, pero yo tengo mucho trabajo encima de la mesa», ha reprochado, tras exigir conocer tanto el balance económico del año 2018 como «qué inconvenientes» está poniendo la Real Casa de la Misericordia al pliego de condiciones. Ibaibarriaga ha acusado al gobierno municipal de mala gestión por permitir el actual régimen de copropiedad «del siglo pasado» que está retrasando los nuevos usos, pedido «transparencia» en las cuentas para saber a cuánto asciende «el minus» y criticado que «va a incumplirse la promesa de un nuevo modelo de gestión para Vista Alegre este mandato. Y una vez más, ha censurado que hayan impedido a los vecinos y a otros grupos decidir el futuro de la plaza.

La portavoz de UdalBerri, Carmen Muñoz, ha preguntado «qué es lo se esconde exactamente tras el retraso de estos pliegos». «La catedral del maltrato animal de Bilbao debe reconvertirse o que se derrumbe y se aproveche ese gigantesco espacio», ha reivindicado. «Toros sí por afición y porque es bueno para la ciudad», ha dicho el portavoz popular Luis Eguiluz. «Siento cariño y admiración por usted, pero ha hecho como Don Tancredo», ha lanzado a Del Hierro, acusándole de parecerse al individuo que se cubría de blanco en las plazas al que el toro nunca embestía al creerle una estatua.

«Nos ha convocado para nada. Como ya hizo la otra vez, podía haber pospuesto la comparecencia», ha criticado. A su juicio, se está poniendo en riesgo «al toro en Bilbao». Del Hierro ha asegurado que desconocía qué correcciones quería introducir la copropietaria. «Deben ser matices superficiales. Se lo haré saber y les daré cuenta de las cuentas», ha prometido, tras recordar que hay una prórroga hasta el 1 de octubre con la empresa Martínez Flamarique, y que los festejos taurinos se van a celebrar. «Se trata de un pliego complejo», ha justificado el socialista Alfonso Gil. «Compartimos la propiedad de la primera plaza del mundo. Se buscan otras actividades que le den vida y cobertura a la zona», ha señalado antes de lanzar un mensaje de «tranquilidad» a los taurinos.