Paata Burchuladze y su esposa, en el Euskalduna.Bernardo Corral
El robo de la caja fuerte a un divo de la ópera en un hotel bilbaíno
La memoria negra ·
Unos ladrones se apoderaron de cuatro millones de pesetas en joyas de la mujer del artista, que interpretaba una obra en el Euskalduna, y una importante cantidad de marcos, en diciembre de 1999
El divo georgiano del bel canto, Paata Burchuladze, considerado una de las voces de bajo con un timbre más bello y mayor volumen del siglo XX, no debe tener un buen recuerdo de su estancia en Bilbao de diciembre de 1999, o al menos el sabor será agridulce. Triunfó en el escenario del Palacio Euskalduna con el estreno de 'El Barbero' de Sevilla, pero los ensordecedores aplausos del público se apagaron en seco cuando llegó al hotel Carlton donde se alojaba, junto con su estilosa esposa.
Al entrar en la suite, comprobó con estupor que los cacos le habían desvalijado la caja fuerte y se habían llevado joyas valoradas en cuatro millones de pesetas de entonces, que debería haber lucido su mujer durante las veladas que permanecieron en la capital vizcaína. Los ladrones, que nunca llegaron a ser descubiertos, arrancaron de cuajo el depósito de seguridad, que contenía, además de las alajas, una importante cantidad de marcos.
Regresó a Bilbao en 2002
Nacido en febrero de 1955 en Tiflis, capital de Georgia, el artista tenía entonces 44 años. Interpretó su papel con éxito en la obra de Rossini en el Palacio de congresos bilbaíno los días 7 y 11 de diciembre, junto a la orquesta del teatro Mariinsky de San Petersburgo. La estrella estaba acostumbrada a los grandes escenarios de las óperas del mundo, como el Covent Garden de Londres, la Scala de Milán, la Straatroper de Viena o el Metropolitan de Nueva York. Encarnó al Don Giovani con Herbert von Karajan en la capital neoyorquina, o el Ramfis de Aída, en compañía del gran Luciano Pavarotti y el maestro Zubin Mehta. Ya había visitado la capital vizcaína con anterioridad, y de hecho, había debutado la temporada anterior con la ABAO formando parte del elenco de la popular 'Khovantschina'.
Visiblemente disgustado al descubrir que había sido víctima de un robo en su dormitorio, Burchuladze debió de pegar un grito con su potente voz. De inmediato, comunicó el suceso a los responsables del establecimiento, de cinco estrellas, quienes a su vez avisaron a las compañías aseguradoras. Por lo general, los hoteles no suelen responsabilizarse de las propiedades de los huéspedes, aunque en este caso, los directivos del complejo hotelero anunciaron que iban a estudiar el caso para dar una respuesta rápida al cantante. Se desconoce si el divo llegó a interponer una denuncia ante la Policía Municipal de Bilbao, que aquel año 1999 había registrado otros tres hurtos, aunque de mucha menor cuantía, en hoteles de la villa, todos ellos en verano.
El robo no impidió que Paata Burchuladze regresara a Bilbao dos años después para participar en una grandiosa representación rusa de nuevo en el Euskalduna, en diciembre de 2002. Aquella vez, regresó a su casa con todas sus pertenencias.
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