Laura González
Zalla
Martes, 21 de marzo 2023
La sombra del futuro parque eólico en la sierra que rodea Zalla, Gordexola y Güeñes sigue atormentando a los vecinos de Las Encartaciones. Hace apenas unos días que el proyecto, que plantea instalar seis aerogeneradores de más de 100 metros de altura con sus correspondientes ... turbinas y palas de unos 80 metros, entró en fase de tramitación administrativa, tras no haberse registrado ninguna propuesta alternativa a la planteada por la firma Euskal Haizie, promotora del plan.
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En la comarca se recibe con mucha alarma cada noticia en relación a este tema, a la espera de que el Gobierno vasco decida si otorga o no los permisos necesarios. En Zalla, ayuntamiento gobernado por el PNV, su alcalde, Juanra Urkijo, ya aseguró hace unos días que de ejecutarse el proyecto supondría «una grave afección al patrimonio natural y paisajístico». Esto ha quedado plasmado en la mañana de este martes en una moción aprobada por unanimidad en un pleno extraordinario, en la que el Consistorio de Zalla se ha comprometido a rechazar en bloque el parque eólico y a utilizar «los medios a su alcance para paralizar el proyecto», incluyendo todas las herramientas de las que dispone el planeamiento municipal «y los restantes instrumentos de ordenación urbanística».
Han acordado también informar al Gobierno vasco de manera oficial de esta desaprobación del proyecto y de todas las medidas que al respecto pondrán en marcha, iniciando la coordinación entre los demás municipios afectados -Güeñes y Gordexola- para realizar acciones de manera conjunta. Según sostienen, «la estrategia de promoción de las energías renovables y su plan de acción han de proteger las reservas de biodiversidad que representan las áreas de montaña mejor conservadas», destacando que este parque eólico, como ya manifestaron en las alegaciones que envió el Ayuntamiento, implicará una gran afectación para el entorno, «con el consiguiente perjuicio para la biodiversidad, el patrimonio histórico, el atractivo turístico y la economía local».
El impacto de la línea de alta tensión de evacuación de la energía asociada discurrirá en su mayor parte, según denuncian, por el término municipal de Zalla. El Ayuntamiento destaca que para su construcción y funcionamiento se pondrán en riesgo acuíferos y varias especies de flora, fauna y avifauna protegidas en un espacio singular que además cuenta con un parque botánico forestal. «Se moverían cantidades enormes de tierra al crear las pistas de acceso y la cimentación de las torres, afectando a las aguas de las cabeceras de arroyos y manantiales».
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Los efectos perjudiciales de los molinos irán, no obstante, «mucho más allá». Y es que para Las Encartaciones el paisaje es uno de sus principales motores económicos, «un activo valioso y un recurso emocional y cultural». «Consideramos que la incidencia del parque eólico, así como sus infraestructura asociadas, afectarían directamente a un entorno rural de montaña muy valorado paisajísticamente para actividades recreativas y deportivas», añade la moción, recordando que una instalación como ésta, o cualquiera otra actividad industrial, «debe cumplir con el planeamiento de ordenación territorial del Ayuntamiento».
Ante este escenario, todos los partidos políticos con representación municipal tratarán de recurrir a todas las herramientas al alcance del Consistorio. Por ejemplo, a la potestad de los ayuntamientos de decidir los usos de sus suelos a través del Plan General de Ordenación Urbana. Pero en el caso de los parques eólicos es diferente, hay letra pequeña. La reforma de la Ley de Administración Ambiental aprobada por el Parlamento vasco en 2021 faculta al Gobierno autonómico a imponer proyectos de este tipo si considera que prima «un interés público superior». Pese a todo, el municipio de Zalla está dispuesto a plantar cara a estos gigantescos aerogeneradores, recordando que en un pleno celebrado en 2012 aprobaron por unanimidad una moción del grupo ecologista Otsoaren Taldea para declarar al monte de este municipio libre de parques eólicos. Una lucha que una década después está más candente que nunca.
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Existe un proyecto similar que afectaría también a Las Encartaciones, en el que se esperan levantar ocho molinos en el entorno de Arcentales, Sopuerta, Galdames y Muskiz. La Diputación ya emitió un informe desfavorable alertando de que vulnera la normativa foral, y el Gobierno central ha tumbado recientemente un plan similar en la zona más próxima de Cantabria alegando su impacto para las aves. Sin embargo, la consejera de Desarrollo Territorial del Ejecutivo autonómico, Arantxa Tapi,a adelantó hace unas semanas que este parque de Arcentales cumple todas las garantías y que Euskadi tiene la «necesidad urgente» de avanzar en el desarrollo de su mapa eólico.
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