Santurtzi ganará terrenos industriales en el problemático vertedero de Kabiezes

«Por fin podemos hablar ya de una solución para ese terreno de alrededor de siete hectáreas de suelos contaminados», subrayó la alcaldesa, quien incidió en las reuniones constantes y el trabajo permanente realizado entre el Departamento de Medio Ambiente del Ejecutivo autónomo, la Agencia Vasca del Agua URA y el propio Ayuntamiento. «Es una gran noticia para Santurtzi que por fin haya un compromiso y se pueda descontaminar», reiteró.

Ramos recordó que uno de los principales escollos era el río Molino, afluente del Ballonti, que discurre entubado por los terrenos. A él se habría estado filtrando el lindano –pesticida altamente tóxico– acumulado en la parcela. En los terrenos se ha llegado a denunciar la presencia de más de mil toneladas de este compuesto. Sacar el río a la superficie habría supuesto crear taludes de más de 20 metros de altura, lo que significaría dividir la parcela y hacerla inviable para cualquier desarrollo. En lugar de esto, se apostará por un doble entubado con medidores de contaminación a la entrada y a la salida, así como la recogida de lixiviados y su pruficación. «Sin esta medida hubiera sido imposible que entrara Sprilur a actuar, o cualquier otra entidad», planteó el edil.

Ramos reivindicó que con la actuación se ha conseguido desentamponar «uno de los principales problemas del municipio», lo que les permitirá «avanzar de manera potente en los objetivos medioambientales y de impulso a la economía», aseguró. De hecho, recordó la escasez de suelos industriales en Santurtzi.

Los terrenos de Etxe-Uli desencadenaron la primera condena penal por un delito ecológico en el País Vasco, en 1997, con una multa de 10 millones de las antiguas pesetas y seis meses de prisión para los dueños del terreno. En 2011 se le impusieron nuevas sanciones, por valor de 1,2 millones de euros, que tras varios recursos se fijaron para 2015, en el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, en 480.000 euros.

Los responsables municipales no entraron ayer en los posibles acuerdos alcanzados entre Sprilur y los propietarios del solar, y recordaron que las parcelas fueron objeto de varias actividades industriales en el pasado, como la de estacionamiento de autobuses y camiones, reparación de contenedores o escombrera. A finales del 2011 el Ayuntamiento de Santurtzi fijóun plazo de seis meses para acabar con las actividades que seguían produciéndose en la zona, y ahora los terrenos permanecen cerrados.

La de Etxe-Uli es la actuación más esperada de las anunciadas esta semana para la comarca por parte del Gobierno vasco. No obstante, entre los 255,7 millones de euros de Sprilur, dirigidos a 32 municipios, también se incluyen planes para desarrollar un Elkartegi en Zalla, un polo de empresas tractoras en Güeñes, la compra de una parcela terciaria en Sestao, la de Navacel en Trapagaran, y la continuidad a las dos parcelas adquiridas el pasado año en el barrio baracaldés de Burtzeña, por 11,6 millones de euros.