Rontegi y Retuerto soportan la mayor contaminación acústica en Barakaldo

¿Y esto a qué se debe? «Principalmente al tráfico viario, porque las carreteras que nos atraviesan soportan unas intensidades de circulación elevadas», ha explicado este lunes Alba Delgado, responsable del área de Desarrollo Sostenible y Medio Natural, antes de citar tanto a la Autovía del Cantábrico, la A-8, la carretera más transitada de todo Bizkaia; como a la BI-30, el vial que discurre hacia la Margen Derecha a través del puente de Rontegi. «Pero también tenemos otras carreteras con gran circulación durante varias horas del día como la N-634 o la AP-8, la Supersur».

Este estudio lo ha realizado una empresa especializada, con mediciones acústicas en muchos puntos del municipio, a una altura de cuatro metros sobre el terreno. Se han analizado para ello todos los focos de ruido ambiental que establece la normativa vigente, como son el tráfico viario, el ferroviario y el ruido industrial. En este último caso, la zona de Lutxana es la que mayor contaminación acústica de este tipo soporta, «pero solo en momentos puntuales», han matizado desde el Consistorio. Además de todo ello, también han examinado el impacto del ocio en Barakaldo. «En Zaballa aunque la media no es alta se concentra mucho el ruido en las tardes y noches de los fines de semana», aseguran.

En lo que respecta al barrio de Retuerto, por el que atraviesa tanto la A-8 como la N-634, es el núcleo en el que se encuentra el mayor número de personas afectadas en todo el municipio. Casi un cuarto de la población de esta zona soporta niveles de ruido superiores a los Objetivos de Calidad Acústica (OCA). Por su parte, Rontegi, que cuenta con una de las principales entradas junto al BEC, y con la presencia a unos metros del puente con el que comparte nombre, es el barrio de todo Barakaldo en el que se superan más de media –10 decibelios– los umbrales de calidad acústica.

«El ruido es la segunda causa de enfermedad por motivos ambientales. La OMS (Organización Mundial de la Salud) calcula que una tercera parte de la población mundial tiene algún grado de pérdida auditiva como consecuencia de ello, pero además genera estrés, trastorno del sueño, ansiedad, pérdida de memoria o patologías cardiovasculares», ha recordado este lunes el segundo teniente de Alcalde, Carlos Fernández.

Este mismo se ha encargado de destacar que en Barakaldo se han reducido los datos «a más de la mitad» en los últimos siete años, sobre todo debido a la limitación a 30 kilómetros por hora de la velocidad en las principales calles de la ciudad. Ahora se quiere seguir incidiendo en ello con el plan de acción en el que se trabajará a partir de este mapa del ruido, y con el que se podría reducir la velocidad en otros puntos, no permitir la apertura de ciertas actividades o favorecer la instalación de pantallas vegetales. «No sumar ruido es muy importante», ha subrayado Delgado.