«No queremos que la Variante Sur Ferroviaria destroce más aún Gorostiza»

Un proyecto que acaba de recibir el visto bueno ambiental –primero de la Diputación y luego del Gobierno central– aunque ha levantado ampollas en el Ayuntamiento, donde pelean para que su paso por el río Cadagua se haga de manera soterrada. Pero desde la Asociación Vecinal Pulmón Verde de Gorostiza, surgida en 2017 para hacer frente a esta «amenaza», no quieren ni oír hablar de ninguna de estas dos alternativas, rechazando de pleno que un nuevo trazado atraviese este valle, «ya sea sobre pilares o bajo tierra», claman los residentes. «No queremos que vuelvan a destrozar el barrio, ni por arriba ni por abajo. En su día ya nos hicieron daño con la Supersur y no estamos dispuestos a que ahora, en un tramo de menos de 100 metros, convivan dos viaductos. Sólo pedimos que nos dejen ya en paz, que podamos vivir aquí tranquilos», declara a este periódico Peru Maza, uno de los portavoces de esta agrupación, quien reconoce que «el aval al proyecto emitido desde el Ministerio nos ha caído como un jarro de agua fría».

Todavía se desconoce el trazado exacto, pero todo apunta a que habrá «expropiaciones de terrenos» y que «casi con seguridad» algunas de ellas afecten a viviendas habitadas en la actualidad. «Por no hablar de las fincas que verán levantarse a su lado moles de 20 metros», añade indignado. Ante esta situación, la asociación vuelve a rescatar una alternativa que la plataforma Barakaldo Naturala ya puso sobre la mesa hace años, bautizada como 'Variante 0', elaborada por ingenieros y profesores de la UPV.

En ella se plantea el soterramiento y la modernización de las líneas de cercanías existentes en la zona –la C1 y C2–, por las que podrían discurrir tanto trenes de pasajeros como de mercancías, en este último caso con un flujo superior al previsto por Fomento. Una solución que permitiría conservar espacios naturales y posibilitaría la regeneración urbanística del espacio que dejarían libre las vías al paso por los municipios de la zona. «No entendemos por qué nadie ha defendido este plan, por qué ni siquiera se ha considerado», dice Carmelo Villanueva, otro vecino inquieto por el curso de los acontecimientos.

Desde la agrupación vecinal insisten también en la complejidad que entraña el soterramiento, alternativa que defiende el Ayuntamiento, que ya ha solicitado al Ministerio personarse como parte interesada para poder así defender «la viabilidad técnica y medioambiental» del túnel bajo el río Castaños. «Que no nos vendan esa moto. Hay expertos que descartan esa posibilidad por el grado de inclinación que habría que imprimir al trazado –critica Maza–. Lo que tendrían que hacer los políticos es plantarse y decir que por aquí no pasen», añade.

Para conocer cuál es la situación actual, este lunes se celebrará una asamblea vecinal en Gorostiza, junto al carrejo de bolos, a las 19.00 horas, a la que acudirán expertos y ecologistas, y a la que invitan a todos los baracaldeses. Además, la asociación está elaborando un escrito para que pueda ser debatido en pleno, y avanzan que convocarán manifestaciones. También preparan banderas para colgar en las ventanas y balcones del barrio, así como del resto de la localidad, para tratar de salvar, dicen, el pulmón verde de Barakaldo.